Ferrari, al asalto del trono de Mercedes

Ferrari ha presentado esta mañana en Maranello el nuevo monoplaza para 2019, denominado SF90, un coche que a priori presenta una clara línea continuista con respecto al modelo anterior, salvo la adaptación aerodinámica que impone la nueva normativa. Ha sido la presentación más destacada de todas las que se han hecho y refuerza el hecho de que Ferrari come aparte en la F1... pese a que no gana.

El principal cambio que presenta la Scuderia, como ya se sabía, es el ascenso del suizo Mattia Binotto, que ha pasado de director técnico a responsable de la Gestión Deportiva, y, por otro lado, la presencia del monegasco Charles Leclerc junto a Sebastian Vettel.

El objetivo de Ferrari, obviamente, después de haber estado cerca las dos últimas temporadas, es destronar a Mercedes. Como en la mayoría de coches presentados hasta ahora -Alfa Romeo es el único que no se ha presentado hasta ahora y lo hará el lunes en Barcelona-, los principales cambios que se pueden observar se centran en el alerón delantero, aunque el diseño de Ferrari presenta diferencias en los aletines con respecto a lo visto hasta ahora.

A primera vista, además del cambio en la nomenclatura del bólido, destaca que el rojo brillante ha dejado paso a uno más intenso y mate. El SF90 se ve una continuación del coche del 2018, pero sus opciones además del potencial del bólido estarán en función a que consigan corregir los numerosos errores del pasado ejercicio, cometidos tanto por los pilotos como por la gestión del equipo o la falta de fiabilidad del coche en la recta final del campeonato. Después de once años -el último título lo consiguió Kimi Raikkonen en 2007- acabar con el dominio de Mercedes se ve a su alcance.