Carlos Sainz: El título como objetivo en Ferrari

En su novena temporada en la F1 y su tercer año de rojo, el piloto madrileño busca dar el salto de calidad definitivo

"He dado una serie de pasos en mi carrera como piloto, pero estoy en un punto en el que debo desafiarte a mí mismo”, afirma ambicioso, a sus 28 años

Carlos Sainz afronta su tercera temporada con Ferrari, dispuesto a pelear por la corona de F1

Carlos Sainz afronta su tercera temporada con Ferrari, dispuesto a pelear por la corona de F1 / Scuderia Ferrari

Laura López Albiac

Laura López Albiac

Analítico y perfeccionista al extremo, Carlos Sainz ya tiene en mente el dibujo exacto de lo que le espera este año con el Ferrari SF-23. Después de los test de Bahrein, el pìloto madrileño tiene la certeza de que el nuevo monoplaza de Maranello puede permitirle pelear por el título en 2023, aunque sabe también que el coche tiene puntos débiles que habrá que pulir. Sobre todo porque visto lo visto en la pretemporada, está seguro de que una vez más Red Bull empieza con ventaja. “El RB19 tiene muy buena pinta. Ya eran más rápidos que nosotros el año pasado y quizá han dado un paso más, pero nuestro objetivo es trabajar al máximo para estar a su altura”, advierte Carlos, ambicioso.

A sus 28 años, con ocho temporadas de F1 a sus espaldas y en su tercer año vestido de rojo, Sainz está en la plenitud de su carrera deportiva. En 2022 llegó por fin la ansiada primera victoria, que además tuvo el mejor escenario posible, el circuito de Silverstone, la ‘cuna’ del campeonato del mundo. En total su balance fue de nueve podios y tres poles. Pero el quinto puesto en la clasificación final resultó sin duda insuficiente para alguien tan competitivo. Carlos aspira a ser campeón y está en el equipo adecuado para intentar cumplir su sueño. Ferrari, que no gana un Mundial desde 2007 con Räikkönen, tiene tanta ‘hambre’ de éxito como sus pilotos, Sainz y Leclerc, actual subcampeón, y también los recursos para colmar la esperanza de los tifosi.

Autocrítica

Este invierno Sainz ha hecho autocrítica, revisando cada detalle, cada carrera y en especial sus problemas de adaptación al coche del año pasado. “Terminé la temporada pasada teniendo muy claros los aspectos que quería mejorar, cómo podía ser mejor piloto. No fue un año fácil pero gané una carrera, hice muchos podios y tres poles con un coche con el que no estaba a mi mejor nivel. Confío en mis posibilidades y se que cuando estoy cómodo en el coche soy capaz de hacer cosas buenas. Así que estoy emocionado ante lo que viene”, apunta.

“La consistencia era uno de mis puntos fuertes como piloto pero el año pasado, por la razón que fuera, abandoné esa consistencia que me hizo tan fuerte en McLaren y en mi primer año con Ferrari. Pero hay más cosas, como la interacción con el equipo, la resiliencia mental, el estilo de pilotaje… conceptos en los que he puesto mucho esfuerzo estos últimos meses. He dado una serie de pasos en mi carrera como piloto, pero estoy en un punto en el que debo desafiarte a mí mismo”, subraya Carlos, que despidió la pretemporada con buenas sensaciones.

 “Hasta que no vaya al límite en clasificación, a buscar esa última décima que me faltaba al principio del año pasado, es imposible saber si la tengo en el bolsillo o no. No lo sabremos hasta la primera carrera, pero he intentado llegar lo más preparado posible, que es lo que me faltó el año pasado. Explorar cosas de ‘set-up’, de estilo de conducción. El motor parece fiable, no hemos tenido problemas y eso es buena señal. Si el coche está para ganar o no, lo descubriremos en la primera carrera”, afirma.

Sin jerarquía de equipo

La llegada a Ferrari del francés Fréderic Vasseur como máximo responsable del equipo en sustitución del cuestionado Mattia Binotto ha generado otro debate recurrente este invierno respecto a la posible introducción de una jerarquía de pilotos número 1 y 2, alimentado por la estrecha relación que Vasseur mantiene con Charles Leclerc. Ambos compitieron juntos en categorías inferiores y el monegasco debutó en la Fórmula 1 de la mano del ingeniero galo, que, por si acaso, se ha encargado de negar este extremo.

“Creo que es lo mismo en todas partes, tenemos dos pilotos muy buenos y ambos pueden hacer el trabajo. Tendremos la capacidad de proporcionarles exactamente el mismo coche, la misma estructura y el mismo soporte. El objetivo es ganar con Ferrari, no habrá un número uno o un número dos. Pero si en un momento dado tenemos que actuar, lo haré. No importa si es uno u otro”, aclara.

Para los escépticos Vasseur  recuerda que quiso fichar a Carlos Sainz "cuando yo estaba al frente de Renault" años atrás "y también en Sauber también intenté convencerle, sin éxito. Siempre hemos tenido una muy buena relación. Confío en él y creo que ha demostrado en los últimos años que es un potencial ganador. Es muy importante para el equipo que no tengamos un número uno y un número dos. La organización es clarísima, pero tienen que hacer su trabajo, y si en algún momento tengo que actuar por Carlos y por Charles, lo haré”, sentencia.