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La huelga de General Motors retrasa la producción del Corvette Stingray

El primer Corvette de la historia con motor central no se producirá hasta febrero del año que viene.

Chevrolet Corvette Stingray.

Chevrolet Corvette Stingray. / GM

Àlex Soler

Àlex Soler

La huelga de trabajadores de 40 días de General Motors, del 16 de septiembre hasta el 25 de octubre, ha tenido consecuencias importantísimas para la firma estadounidense, que aseguró a finales de octubre que les costaría alrededor de 2.900 millones de dólares. Más allá de la parada de producción de vehículos actuales que la huelga ha propiciado, el parón también ha provocado que Chevrolet decida retrasar el inicio de la fabricación de su nuevo deportivo, el Corvette Stingray con motor central.

En un principio, el inicio de la producción del Corvette Stingray estaba prevista para finales de 2019 tras el ensamblaje de la última unidad del Corvette 2019 con motor delantero, vendida en una subasta por 2,7 millones de dólares. No obstante, la huelga ha obligado a la marca a posponer la fabricación del Stingray hasta febrero de 2020. La fábrica en la que se producirá, en Bowling Green, Kentucky, deberá parar antes para prepararse para el nuevo coche. Asimismo, según medios locales, General Motors también ha pospuesto la presentación de nuevos modelos a causa del parón.

Desde 53.781 euros

El primer Corvette de la historia con motor central tendrá un precio de salida de 59.995 dólares (53.781 euros). Por ese precio, la marca estadounidense ofrece el vehículo con transmisión automática y con su motor de 495 CV de potencia y 465 Nm de par máximo. A partir de ese precio, el Corvette Stingray llegará con tres niveles de acabado, arrancando el tope de gama en 71.945 dólares (64.493 euros) y el segundo desde los 67.295 dólares (60.314 euros).

Entre sus extras, el sistema de amortiguadores adaptativos, uno en los que Chevrolet puso más énfasis en el momento de su presentación, costará 7.300 dólares más (6.544 euros). El paquete deportivo Z51, que mejora su aceleración con ajustes en el sistema de escape y de suspensiones añadirá 5.000 dólares más (4.481 euros) al precio en cualquier acabado. La mejora de rendimiento del sistema de escape, que suma cinco caballos y cinco Nm de par máximo a sus prestaciones, encarecerá la factura 1.195 dólares más (1.071 euros).