El momento en el que Marc Márquez se cae y se ríe de sí mismo

Marc Márquez se cayó en el podio del Circuit

Marc Márquez se cayó en el podio del Circuit / Valentí Enrich

Josep Viaplana

Josep Viaplana

Marc Márquez cogió aire en el GP de Catalunya, una carrera que, a priori, se le puso muy cuesta arriba después de haber sufrido cinco caídas en entrenamientos y ello, lógicamente, no hacia presagiar que pudiera acabar sumando el podio 93 de su carrera deportiva.

Con 24 años, diez carreras disputadas en el Circuit de Barcelona-Catalunya, vivió un fin de semana muy complicado. Se cayó cuatro veces el sábado, tres en calificación, y otra ayer por la mañana durante el warm-up. Todas ellas al perder la rueda delantera por la falta de adherencia en un gran premio crítico para los neumáticos, sobre todo los delanteros.

Fueron cinco caídas en la pista, pero hubo más, dos más. En total, siete. La sexta fue también en el warm-up. En el pitlane… y a pie. Bajó de la moto y cuando se disponía a subir a la segunda moto, tropezó con una caja de herramientas y dio una voltereta por el asfalto ante la mirada atónita de los que le rodeaban. Vivió otros dos momentos de estrés. El primero, en la salida, cuando Danilo Petrucci perdió el control de su moto y se le echó encima. El segundo, cuando adelantó a Jorge Lorenzo. No se fueron al suelo de milagro. Parecía que no era su día.

No se dejó amedrentar por las caídas y Marc Márquez salió a la carrera dispuesto a ganar, aunque al final decidió minimizar los riesgos y no lanzar un agresivo ataque sobre Dovizioso para amarrar un resultado que le supo a gloria. No habían acabado aquí sus caídas. Faltaba una, aunque la última fue provocada. Cuando salió al podio para celebrar la segunda posición se fue por los suelos, entre carcajadas. Hizo una voltereta parodiando la caída que había tenido por la mañana en el pitlane, un guiño a sus mecánicos que ante todo son sus amigos.

Un fin de semana complicado que acabó bien, ya que el séptimo podio en Barcelona en diez carreras le ha permitido meterse de nuevo en la lucha por el campeonato. En MotoGP solo falló en 2015, cuando se cayó en la tercera vuelta tras un toque con Lorenzo.