El Celta hace más pesada la cruz del Girona

El Girona pierde un duelo directo ante el Celta

El Girona pierde un duelo directo ante el Celta / LaLiga

Sebastián Vargas Rozo

Ni el más ferviente de los aficionados del Girona pudo elevar tan fuerte su plegaria para cumplir el milagro de volver a la victoria. Los de Eusebio siguen cargando su cruz al hombro al cosechar una nueva caída -la quinta en línea-, esta vez ante el Celta del todopoderoso Iago Aspas y de un ángel llamado Boufal. Entre ambos anularon el tanto de Portu y dejaron en Balaídos una sonrisa al escapar de la 'zona roja'.

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LaLiga

2
1
Alineaciones
Celta
Rubén Blanco; Hugo Mallo, Cabral, Araújo, Olaza; Lobotza, Yokuslu; Boudebouz (Jozabed, 88'), Boufal (Hjulsager, 80'); Aspas (David Costas, 90'), Maxi Gómez.
Girona
Bono; Pedro Porro, Alcalá, Bernardo, García Carnero (Soni, 85'); Pere Pons, Douglas Luiz, Aleix García (Borja García, 46'); Roberts (Juanpe, 46'), Stuani, Portu.

Quien verdaderamente entendió que el partido era una final fue el conjunto gallego, que saltó desde el 'vamos' a comerse a los rojiblancos, todo a sabiendas que un triunfo lo sacaba de la zona roja. Y no demoraron en poner a prueba las manos de Bono, pero el marroquí respondía bien ante los intentos de Boufal, Aspas, Boudebouz y Maxi Gómez, cuarteto de oro ofensivo en Balaídos para los dueños de casa.

Ante un estéril Girona que era incapaz de encontrar nexos con Stuani, el Celta tomó el papel de púgil sano y propinó un golpe que dejó groggy a los gerundenses. Fue el tanto de Iago Aspas -¿quién sino?- a pase de Boufal, rematando así su 16º tanto en LaLiga y encadenando el cuarto partido consecutivo anotando tras haberse perdido la jornada pasada en el Wanda por una suspensión. Su espalda carga con las ilusiones de la afición: si él cree, todos creerán. Cuestión de fe.

Portu también quiso creer en sus opciones. Cuando nada avisaba peligro en campo de Rubén Blanco, el exValencia se las arregló para perfilarse tras un pase de Alcalá y fulminó de pierna derecha. Situación curiosa: marcó al 47' y recién el juego se reanudó a los 53'. ¿La razón? Del Cerro Grande tuvo sus dudas por la posición de Stuani, pero finalmente le dio la derecha a los rojiblancos.

Su tanto fue la oportunidad de dar un paso adelante... pero nada más lejos de la realidad. Boufal seguía haciendo de las suyas por banda izquierda, secando a Pedro Porro en cada avanzada. En una de esas el joven lateral le dio mucho espacio al marroquí y este no perdonó: remate con el interior y Bono no tuvo nada que hacer

El correr de los minutos hizo más agónica la travesía para un Girona que no encontraba respuestas a sus preguntas. Las caras lo decían todo. Porque, a falta de cinco partidos para terminar la temporada, los 34 puntos obtenidos saben a poco. A zona roja, que aún no la pisan... pero casi. La de Balaídos era una oportunidad perfecta para redimir los pecados, pero fue todo lo contrario: el resucitado fue el Celta. Los gerundenses deberán esperar para su pascua.