Clifton Onolfo vuelve a entrar en escena

Onolfo, máximo accionista del Reus

Onolfo, máximo accionista del Reus / sport

Xavi Turu

Después de una larga temporada sin pronunciarse públicamente, el actual manager general del Reus, Clifton Onolfo, ha vuelto a entrar en escena. Con la expulsión del equipo de Tercera División, el presidente de la entidad rojinegra no había vuelto a mover ficha, ni en sus redes sociales, ni en ningún comunicado.

Se había apoderado el silencio absoluto en las oficinas de la entidad catalana y no había existido ningún tipo de pronunciación al respecto. El hecho de no presentarse durante las primeras jornadas de liga, los rojinegros quedaron sin posibles movimientos para intentar sacar a flote un club que estaba más fuera que dentro de fútbol. Onolfo insistió, pero cada vez que prometía una cosa, cuando la ponía en práctica era todo lo contrario.

Cuando ayer lunes se supo que el Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) <strong>anularía el descenso del Reus</strong> de Segunda B a Tercera, los reusenses podrían ver como todavía tendrían un hilo al que agarrarse antes de terminar cayendo por el abismo. Con todo, Clifton Onolfo ha hablado en sus redes sociales y ha manifestado que “estamos trabajando” para que el fútbol no acabe de desaparecer en el club rojinegro. Puede ser otra de las muchas promesas que ha realizado el norteamericano o no, pero hay que recordar que hace unos días no se presentó frente al Rubí, hecho que provocó la expulsión directa del filial de Primera Catalana.

La RFEF pone trabas al asunto

El hándicap ha llegado a través de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), después de saber que el organismo que encabeza Luis Manuel Rubiales, ha decidido que recorrerá la anulación del descenso del Reus de Segunda B a Tercera División por parte del Tribunal Administrativo del Deporte.

Desde la Federación matizan que es una opción “inviable” que el conjunto catalán pueda entrar a competir en Segunda B, y menos en la actual campaña. Ambas instituciones no se ponen de acuerdo y se abre otro abanico de posibilidades para un Reus que empezó con su montaña rusa desde hace más de un año.