Brasil gana la batalla de Lima (2-4) con un 'hat-trick' de Neymar

Neymar celebra uno de sus tres tantos que marcó contra Perú

Neymar celebra uno de sus tres tantos que marcó contra Perú / sport

Joaquim Piera

Joaquim Piera

Brasil levantó dos veces un marcador adverso y sumó una victoria de mérito en Lima, que le permite hacer el pleno al seis en el arranque de las Eliminatorias Sudamericanas. Un 2-4 muy trabajado ante un Perú muy correoso, en un partido en que la Seleçao ganó por la calidad individual y la estrella de Neymar.

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Clasificación Mundial Zona América del Sur

2
4
Alineaciones
Perú
Gallese, Advíncula, Zambrano, Abram, Trauco, Aquino, Tapia (Cueva, 90'), Yotún, Carrillo, Christofer Gonzales (Araujo, 91') y Farfán (Andy Polo, 90')
Brasil
Weverton, Danilo, Marquinhos (Rodrigo Caio, 11'), Thiago Silva, Renan Lodi (Alex Telles, 68'), Casemiro, Douglas Luiz, Philippe Coutinho (Everton Ribeiro, 68'), Richarlison, Neymar y Roberto Firmino (Everton, 68')

El 10 firmó un hat-trick, con dos goles de penalti, en una noche histórica, ya que avanzó a Ronaldo y, con 64 tantos, se situó en solitario,como el segundo máximo artillero de la Canarinha, solo superado por O Rei Pelé y sus 77 dianas. 

Los peruanos, que terminaron con diez, consiguieron desactivar el juego de equipo de los brasileños, pero, ofensivamente, solo vivieron de los fallos del rival. La actuación de los locales fue más que digna y acabaron cargando contra el colegiado, por el penalti que supuso el 2-3.

SUSTO INICIAL PARA BRASIL

La Seleçao salió dispersa. La presión alta preparada por Gareca cortocircuitó la Canarinha, que estaba con sus líneas absolutamente desajustadas. Y Perú sintió que podía morder. Marquinhos dejó un balón muerto en la frontal y André Carrillo, que venía de marcar dos tantos en Asuncion, se incorporó desde atrás y se sacó un tremendo derechazo con el empeine. Un golazo que dejó helado a los brasileños.

La Blanquirroja había sacado máxima tajada de la puesta en escena titubeante de los de Tite, que encima perdieron a Marquinhos prematuramente por lesión.

A Brasil le tocaba remar con la marea en contra. Y se puso manos a la obra. Se hizo con el balón, pero sin poder marcar una cadencia constante. La solución era apelar a la calidad individual. Richarlison, que esta vez fue titular, monopolizó los arranques desde la derecha y dejó un gol hecho a Firmino, que remató encima de Gallese

La Canarnha, más intensa en cada acción, no se asentó hasta que Yotún agarró por la camiseta a Neymar. Un penalti (el primero de la noche) indiscutible, que el ex del Barça transformó con maestría. 

El último tercio del primer tiempo fue brasileño, con un Neymar entonadísimo rompiendo líneas de presión con jugadas muy agudas, frenadas con demasiada contundencia. Coutinho entró más en juego asociándose con un Richarlison muy preciso. 

BRASIL NO APRENDE

Brasil, que se fue al descanso con 68% de la posesión, había cogido las riendas de un choque que fue aumentando de revoluciones.  Sin embargo, en la reanudación, la Seleçao tuvo un bajón, perdió calibraje, ante un Perú más decidido en su presión. Y, una vez más,  la Canarinha pagó muy caro un desajuste defensivo. Un saque de banda lateral acabó en la frontal del área, donde nadie presionó a Tapia. Su lanzamiento tocó en Rodrigo Caio, que dejó vendido a Weverton: 2-1 

Se repetía el escenario del primer tiempo. Brasil reaccionó más rápido y empató en un córner servido en largo por Neymar, que remató Firmino y Richarlison empujó encima de la línea de gol. El VAR eternizó la validación del tanto. 2-2. Allí empezaba un nuevo partido de 30 minutos de duración.

Tite quiso romper la dinámica con un cambio triple. Se marcharon un Firmino fallón, un Lodi poco accionado y un Coutinho, que se vio castigado por la intermitencia del juego y la falta de comando de una Seleçao que jugó a ráfagas.

UN 2-3 DUDOSO

Si Brasil quería ganar, tendría que ser a base de coraje y calidad individual. Y es lo que ocurrió. Un contragolpe, en que Richarlison tal vez hizo falta, desembocó con Zambrano derrumbando a Neymar. Un penalti polémico, muy protestado por los peruanos. Y como si fuera una fotocopia en 3D, el 10 del PSG lo ejecutó exactamente igual, con paradinha y chutando abajo a la derecha del portero.

Perú lo vio perdido y se desquició. El partido se afeó con un codazo tosco e innecesario de Zambrano a Richarlison. Y con 10, llegó el cuarto, en otra contra en la que Neymar cazó un lanzamiento al palo de Everton Ribeiro. Un 2-4 de prestigio, con tres goles de Ney en plan estelar, pero que no esconde las carencias creativas colectivas del equipo de Tite.