La crisis se instala en el Barça Lassa

El Barça Lassa dio una imagen lamentable

El Barça Lassa dio una imagen lamentable / VALENTÍ ENRICH

Xavi Martínez Olivar

Xavi Martínez Olivar

Las alarmas se disparan en el seno del Barça Lassa. Los azulgranas se han convertido en un equipo vulgar, sin confianza ni ideas que este jueves fue presa fácil para el Olympiacos. Los griegos,fieles a su estilo y haciendo su partido, ganaron en el Palau en lo que fue la cuarta derrota consecutiva del Barça Lassa en Euroliga.

117782

EUROLIGA

60
69
Alineaciones
BARÇA LASSA
(14+16+18+12): Heurtel (8), Blazic (2), Claver (13), Singleton (-), Tomic (2) -cinco inicial-, Pangos (3), Hanga (9), Pustovyi (4), Oriola (10), Seraphin (2) y Kuric (7).
OLYMPIACOS
(17+15+23+14): Williams-Goss (10), Spanoulis (14), Papanikolaou (6), Printezis (2), Milutinov (18) -cinco inicial-, Toupane (-), Timma (2), Strelnieks (-), Vezenkov (2), Mantzaris (-), Bogris (5) y Leday (10).

Perdiendo la batalla por el rebote (Milutinov se dio un festín ante TomicSéraphin y Pustovyi), sin poder correr, sin ideas ante la defensa rival empezando por los bases. Todo queda reducido a la inspiración individual de algunos jugadores (Claver en la primera parte,Hanga y Heurtel luego). Otros como Singleton -el fichaje más caro del pasado verano- se dedicó a deambular por la pista.Y el resto pues eso.

Y claro, en este contexto, el Olympiacos de Spanoulis -jugando a lo suyo, moviendo con criterio el balón e imponiendo el ritmo- fue haciendo suyo el partido. Tras un primer tiempo más o menos equilibrado (30-32) por deméritos de ambos (25 por 28 de valoración), el Olympiacos puso la directa en la continuación.

A partir de una defensa inconsistente -demasiadas faltas concedidas con rapidez- atrás y un ataque plano, el Barça cedió la batuta a su rival. Si atacas sin convicción ni equilibrio es lógico que acabes perdiendo. 

Convertido el rebote en una tragedia griega (el Olympiacos capturó 22 ofensivos) el equipo se fue desmoronando tras el descanso. A partir de un 41-54 fue un 'quiero y no puedo' ante un Olympiacos que jugó a lo que sabe y acabó haciendo añicos la defensa del Barça.

Los dos últimos cuartos fueron el fiel reflejo de la impotencia azulgrana.El clásico de liga ante el Madrid en el Palau fue el cénit de este equipo.Pero a partir de aquí comenzó la vuesta abajo y 24 días después, el equipo ha perdido todas sus señas de identidad.Los roles de los jugadores han quedado difuminados y el colectivo deambula sin convicción convirtiéndose en víctima propicia para cualquiera. Europa se esfuma, pero lo peor es que la cuesta abajo de este Barça pinta muy mal. Los frios números lo dicen todo:60 puntos anotados y 40 de valoración. Así no se va a ninguna parte.