Insigne da una alegría a Gattuso

xortunosalzburg  austria   23 10 2019   napoli s lorenzo 200114161017

Insigne en una imagen de archivo. / EFE

sport.es

No con mucha efusividad pero el Nápoles puede sonreír. Tiene permiso tras la victoria cosechada en los octavos de final de la Coppa de Italia que le sirve, consuelo menor, para tomar algo de confianza para encarar una segunda vuelta en liga que debe ser casi perfecta para tener opciones de entrar a Europa. Algo que ahora mismo está a cinco puntos pese a estar undécimos.

121992

Coppa Italia

2
0
Alineaciones
Nápoles
Ospina; Hysaj, Manolas, Di Lorenzo, Mario Rui; Elmas, Fabian (Demme 65'), Zielinski (Allan 84'); Lozano (Callejón 75'), Llorente, Insigne.
Peruggia
Fulignati; Gyomber, Sgarbi, Falasco; Rosi, Falzerano, Carraro (Konate 71'), Buonaiuto (Dragomir (55'), Nzita; Iemmello (Melchiorri 62'), Falcinelli.

Las derrotas ante Inter y Lazio habían abierto de nuevo una herida que intentaron sanar con la llegada de Genaro Gattuso en sustitución de Carlo Ancelotti. No ha caído con gracia el italiano en el banquillo napolitano y debía pasar ante un Peruggia que es octavo en la segunda división italiana.

Sin un juego brillante, la primera mitad estuvo repleta de penaltis. Hasta tres tuvo que señalar el colegiado. Ninguno de ellos clamoroso pero todos ellos bien señalados. El primero, y que abrió el marcador en San Paolo, lo provocó un Hirving Lozano que debe explotar su mejor versión. No lo lanzó el mexicano sino Insigne que con una medio paradiña para engañar al arquero.

No pasaron ni diez minutos que unas manos dentro del área provocaron el segundo de Lorenzo que con la misma técnica de tiro le cambió la dirección a Fulignati para poner tierra de por medio. Las alarmas saltaron cuando Hysaj tocó el balón con el brazo, tras un rebote en su propia bota. Se encargó de apagarlas Ospina con una brillante parada al tiro de Iemmello. Todo justo rozando el descanso.

De verse 2-1 con opciones en la segunda parte a estar de nuevo a una diferencia casi insalvable como se acabó comprobando en una segunda mitad sin misterio y sin fútbol. A los dos ya les iba bien irse para casa con ese resultado. Gattuso toma algo de aire.