Havertz lidera el pase del Leverkusen a semis

Aránguiz, uno de los héroes del Leverkusen

Aránguiz, uno de los héroes del Leverkusen / AFP

Albert Gracia

Los grandes y las copas, esa vieja historia. Partidos y equipos que se igualan solo porque juegan en el torneo del ‘KO’. Y este vaya si se igualó. Llegaba el Leverkusen como gran favorito para pasar a semifinales y, por qué no, para llevarse el título y tuvo que sufrir lo que no está escrito.

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DFB Pokal

3
1
Alineaciones
Bayer Leverkusen
Hradecky; Tah (Diaby, 46'), Bender, Tapsoba; Amiri (Weiser, 46'), Aránguiz, Demirbay, Sinkgraven; Havertz, Alario y Bailey (Bellarabi, 69').
Union Berlin
Gikiewicz; Friedrich, Schlot., Parensen; Ryerson, Andrich, Promel (Kroos, 82'), Lenz; Ingvartsen, Ujah (Andersson, 70') y Bülter (Trimmel, 74').

El Union Berlin plantó su propio muro, jugó de tú a tú contra el cuadro de la aspirina, pero terminó derrumbado con un hombre menos. Bellarabi entró, dinamitó el partido y con un hombre más comandó al Leverkusen hasta las semifinales. Apunta a la final, pero eso primero habrá que verlo. 

Porque haciendo esta primera mitad no puede llegar muy lejos. El Union Berlin le tosió por todos lados, incluso tuvo fases de dominio ante un rival despistado, incapaz de saltar bien a la presión y sin hacer ni una ocasión clara en todo el primer tiempo. Tremendo. Los de la capital tampoco hicieron nada del otro mundo pero se mostraron bien ordenados atrás, saliendo con balón jugado cuando tocaba y teniendo las únicas ocasiones. En una de ellos, por cierto, abrieron el marcador con el cabezazo de Ingvartsen.

En la reanudación, el duelo fue otra cosa. El Leverkusen sacó a Diaby, Weiser y las garras para meter la quinta. El Union esperaba bien puesto, todavía con opciones de abrir brecha pero toda esperanza se desvaneció cuando Lenz se autoexpulsó en el área contraria por una entrada innecesaria. Segunda amarilla y a vestuarios. Con un hombre más y ya con Bellarabi sobre el verde, el Leverkusen apretó de lo lindo y el propio extremo germano puso las tablas tras una sensacional asistencia de Havertz. El de siempre y como siempre. Capitán y figura. 

El joven talento alemán le sirvió el segundo a Diaby para darle la vuelta al partido pero el francés erró. No así Aránguiz, que en el córner posterior remató ante la pasividad defensiva. Con el 2-1, el Leverkusen buscó matar y Diaby así lo hizo con una contra de manual. Pisadita y a dormir. El Bayer está en semis.