El campeón no quiere más sustos en Bélgica

No está siendo una plácida primera fase para el actual campeón de la Champions League. La defensa de la sexta corona de los ‘reds’ lo encuadró en un grupo donde ellos y Nápoles era muy favoritos respecto a Genk y Red Bull Salzburg. Dos cenicientas que se han convertido en lobos en busca de grandes presas. 

La derrota ante el Nápoles pesa en la mochila de un Liverpool que tiene tres puntos, pocos ante la igualdad máxima en la que vive instaurada el Grupo E. El Salzburg cayó en Anfield, pero también dejó mal cuerpo entre los aficionados del templo ‘red’.

Los de Klopp se dejaron empatar un 3-0 de renta ante un Red Bull combativo que vio como Salah finalmente dejaba el triunfo en casa. 

No es muy diferente el rival que se va a encontrar en Bélgica en el Luminus Arena. El Genk cierra el grupo con apenas un punto. Pero menudo punto. El Nápoles ya pasó por caja y se dejó un empate en su visita al estadio belga. Un aviso.

Salah, recuperado

La enfermería del Liverpool se va vaciando y a la recuperación de Alisson, ya jugó ante el United, se le añade la de Salah que ha superado sus molestias en el tobillo y entró en la convocatoria. Veremos si Klopp arriesga y lo alinea como titular o si deberá esperar su turno como revulsivo. 

No ganó un solo partido lejos de Anfield en la fase de grupos del año pasado. Ni ante el Nápoles, ni Estrella Roja ni PSG. Repitió derrota este año ante los italianos. El objetivo prioritario para los ‘reds’ es romper la mala racha fuera de casa.