Revilla: "Setién es pasiego: gente tenaz, dura y austera"

Javier Giraldo

Javier Giraldo

Afable y cercano, el presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, recibe a SPORT para hablar de la llegada de su paisano Quique Setién al banquillo del Barça.

¿Se imaginaba a Setién como entrenador del Barcelona?

Cuando escuché que Valverde estaba en la cuerda floja le comenté a un amigo que el sustituto ideal sería Setién. Siempre dije que era el entrenador que más me gustaba, también porque es de aquí. Le conozco sobre todo como jugador: estuvo doce años en el Racing y no me perdí ningún partido, soy socio desde los once años.

¿Qué imagen tienen los cántabros de Setién?

En una región donde hemos tenido a grandísimos jugadores, él sigue siendo el mejor valorado: Gento, Santillana, Amavisca, Miera, Pachín... ganadores de Copas de Europa. En una encuesta del ‘Diario Montañés’, la gente votó a Setién como el mejor de la historia del Racing.

¿Le irá bien como entrenador del Barça?

Espero que sí: como entrenador, le gusta que sus equipos ofrezcan espectáculo, que jueguen al ataque y presionen muy arriba. Aún no entiendo por qué la gente lo pitaba tanto en el Betis. Pero en el Barça encajará: es un enamorado de la era Cruyff, de ese fútbol que a todos nos entusiasmó. 

¿Conectará con la plantilla?

Sí, el problema es que es una plantilla descompensada. El Barça ha fichado mal y eso es un hándicap. Por eso no creo que le puedan exigir mucho en estos primeros meses, además Luis Suárez está lesionado.

¿Encajará en el entorno del Barça?

Es enérgico y tiene las ideas muy claras, aunque tuvo algún que otro choque. Es pasiego: tiene apellidos pasiegos y eso marca mucho. Los pasiegos son una etnia propia de Cantabria. Hay apellidos que solo son de aquí. Abascal, por ejemplo, es apellido pasiego. Lavín, lo mismo. Setién, igual. 

¿Cómo son los pasiegos?

Es una historia muy  larga. Los pasiegos se establecen en el valle del Pas cuando empieza la Reconquista. Era una zona de maleza y arbustos y había que repoblar. El pasiego solo tiene una obsesión: la vaca. No le hables de trabajar en una fábrica. Dicen que ellos inventaron el helado, el queso y la mantequilla. Apenas tienen huertos: solo piensan en la vaca. Se prestan el dinero entre ellos, no van a los bancos. Están extendidos por muchas partes de España, también por Andalucía: donde hay una vaquería es probable que haya un pasiego. Es gente dura, tenaz y reservada: Abascal, por ejemplo, es un tío que corría detrás de las vacas y luego fue medallista olímpico. 

Una historia curiosa.

En el diccionario, pasiega se define como ‘ama de cría’. A las mujeres pasiegas las enviaban a las casas de ricos de Madrid o Barcelona para criar y amamantar a los niños. En Selaya hay un museo dedicado a ellas: madres que abandonaban a sus familias para ir a casas nobles a criar los hijos de otros. En el viaje se hacían acompañar de perros recién nacidos a los que daban de mamar para que no se les cortara la leche. Muchos reyes fueron amamantados con leches de las mujeres pasiegas. 

Unas heroínas.

Algunas no conocieron a sus propios hijos. Y siempre iban dos mujeres, por si una se ponía enferma. Era terrible. Todo esto ocurría hasta 1920.  Los pasiegos son de una tipología específica: generalmente son muy delgados, de nariz larga y afilada… yo veo a un pasiego y lo conozco a primera vista. Son gente austera y muy sufrida. Y  entre ellos, la morosidad no existe.  

[Revilla habla con entusiasmo de los pasiegos y pide a sus ayudantes que recaben información: cuántas personas llevan el apellido Setién en España -en total, 2.700-, la localización exacta de un pueblo llamado Setién, de poco más de 200 habitantes, a las afueras de Santander, o los apellidos más comunes entre los pasiegos: Revuelta, Mantecón, Miera, etc].

En Cantabria, después del Racing, ¿la afición es más madridista o azulgrana?

Históricamente mucha gente era del Madrid, por jugadores como Gento, Santillana, Marquitos, Miera, Amavisca, Munitis, Helguera, Canales… casi podría hacerse un equipo entero de cántabros que jugaron en el Madrid. Eso hacía que hubiera mucho madridista, sobre todo entre la gente mayor. Ahora, gracias a Messi, mucha gente joven se ha hecho del Barça.