Neymar entra en escena

Se trataba de renovar los votos matrimoniales entre Luis Suárez y su esposa, Sofía Balbi, diez años después de que la pareja celebrara su boda. Pero no fueron los únicos votos que se actualizaron en Punta del Este (Uruguay). Neymar, que aceptó la invitación de su ex compañero para acudir al evento, no dejó pasar una oportunidad única para confirmar que su deseo de volver a vestirse de blaugrana y jugar de nuevo junto a Messi y Suárez sigue vigente. 

'SELFIE' CON MENSAJE

Cuando en España la madrugada empezaba a recogerse, la cuenta de Instagram del brasileño ofreció a sus seguidores una ‘storie’ en la que Neymar aparecía junto a Leo y Luis. El autor de la fotografía era el propio futbolista del PSG, al que se veía feliz y sonriente, al igual que al resto de protagonistas de la instantánea. Luego todos ellos volvieron a dejarse captar por las cámaras de los profesionales contratados para inmortalizar el evento, pero Neymar quiso, de forma voluntaria, ser el primero en lanzar un mensaje inequívoco, sin dar lugar pie a interpretaciones, cuyos destinatarios son dos: Barça y PSG.

El internacional brasileño lo intentó todo el pasado verano para regresar al Camp Nou, pero la operación, extremadamente compleja, no pudo concretarse. Las opciones, a partir de aquel momento, pasaban por abandonar la misión o seguir intentándolo. Neymar dejó muy claro desde Uruguay que no tiene ninguna intención de tirar la toalla, que mantiene intacto su deseo de vestir otra vez la camiseta del Barça y que, además, cuenta con el apoyo de dos de los pesos pesados del vestuario blaugrana. La ‘MSN’ no ha renunciado a reencontrarse en el Camp Nou. 

IMPACTO MUNDIAL

La fotografía colgada por el brasileño se hizo viral en muy pocos segundos y pasó a estar presente no solo en la cuenta personal de Neymar, sino también en el resto de redes sociales gracias a centenares de miles de usuarios que multiplicaron su audiencia en la red. Imposible que la reaparición pública del tridente que ayudó al Barça a ganar la Champions en 2015 no haya llegado a los celulares de quienes deben tomar nota. Tanto en la capital francesa como en la Ciudad Condal.

DEBATE INTERNO

Los propietarios del PSG ya saben que Neymar no ha cambiado de planes y que, tarde o temprano, deberán sentarse a planificar el futuro del futbolista. Tampoco pasó inadvertida la imagen en las oficinas del Barça. La diferencia es que en el club blaugrana el debate interno alrededor del fichaje del brasileño no ha dejado de existir desde que se intentó su incorporación el pasado verano. Hubo desplazamientos a París para negociar con la entidad parisina que no fructificaron, se hicieron números y más números para estudiar la viabilidad económica de la operación y el esfuerzo que estaba dispuesto a realizar el Barça por el jugador era enorme. Pese a todo, no hubo manera.

No todas las opiniones en la Junta Directiva presidida por Bartomeu son proclives a intentarlo de nuevo, pero la posibilidad sigue vigente. Juega a favor del brasileño que el próximo verano su precio de salida ya estaría fijado gracias a la normativa de la FIFA, que permite a los futbolistas rescindir su contrato con el club si llevan más de tres años en él y no han renovado su primera vinculación. Establecer el precio de salida depende de muchas variables, pero desde el Barça creen que estaría alrededor de los 180 millones de euros.

Se trata de una cantidad importante, pero no hay dudas sobre su adaptación y rendimiento y, teniendo en cuenta la inflación que vive el mercado de fichajes, no es disparatada. Además, el Barça está teniendo muchos problemas para encontrar perfiles interesantes en la posición de delantero centro. No consideran que en el mercado haya nada excepcional que merezca la inversión que se pide por ellos. Neymar sí genera, en ese sentido, consenso.