Machín: "Guardiola siempre me ha dicho que sea yo mismo"

Pablo Machín (Soria, 43 años) es el entrenador del líder de Primera, pero sigue sin despegarse del suelo. La suya ha sido una carrera de fondo. A menudo alejada de los focos. Y su ética de trabajo nace en un entorno de agricultores, algún revés en forma de lesiones y una exigencia que se impone para que los demás le sigan.

Con 23 años sufres una lesión en la rodilla y cuelgas las botas; ¿cómo se gestiona algo así cuando uno sueña desde pequeño en ser futbolista?

Bueno, eso visto así, de entrada suena como muy dramático, ¿no? [Sonríe]. Tuve una lesión grave en la rodilla como le ocurre a muchos futbolistas y luego pude haber vuelto a jugar porque me la dejaron mejor de lo que la tenía. Pero pude entrenar por primera vez con niños y me di cuenta de que no echaba tanto de menos jugar. Que ya me apasionaba más entrenar y sentirme protagonista fuera del campo. Así que en ningún momento eché de menos jugar. Ese vacío lo llenaba plenamente entrenar.

Es interesante lo que comentas porque los entrenadores que fueron futbolistas siempre dicen lo contrario, que nunca se vuelve a disfrutar tanto como en el césped…

A ver, yo siempre aconsejo a todo el mundo que intente alargar al máximo su carrera, aunque yo hiciera todo lo contrario. Porque para entrenar siempre habrá tiempo. Pero también hay que saber aprovechar los momentos. Surgió la posibilidad de entrar y yo ya sentía que no iba a ser un excelente futbolista aunque estuviera en Segunda B. Si te digo la verdad notaba mi profesión más como una responsabilidad que como un disfrute, porque jugaba en el equipo de mi ciudad o por lo que fuera.  Notaba la obligación de ganar. No me sentía suelto. Jugaba atenazado por el entorno. Y eso que noté como futbolista escogí sentirlo diez veces más como entrenador [sonríe]. 

¿Qué le diría el Machín entrenador al Machín jugador?

Que valorara mucho más lo que tenía. Hay veces que las cosas te van apareciendo y no te das cuenta de lo difícil que es llegar. En mi caso a ser un equipo de Segunda B. Yo no valoraba lo que era convivir con futbolistas profesionales ahí. Pensaba que era lo normal.  Esto se lo digo muchas veces a jugadores que me vienen  de filiales muy grandes que no han mamado lo que es el barro, el fútbol de verdad que digo yo. Hay mucha diferencia entre los futbolistas que sí que lo han hecho y los que no han vivido este proceso. Y ahí, cuando les vienen mal dadas y no juegan, se vienen un poco abajo. Transmitirlo eso a jugadores de 18-20 años a veces cuesta.

Me hablabas de jugadores que llegan de canteras grandes; ¿crees que el jugador que sale del Real Madrid es más exportable que el de La Masia?

Sí que creo que la cantera del Barça forma a un jugador mucho más específico para un determinado juego para llegar al primer equipo y tiene unas señas de identidad clarísimas. El jugador del Madrid es más versátil. En La Masia seleccionan una serie de cosas más encaminadas al talento o la calidad de pase y en el Madrid se buscan futbolistas completos donde el aspecto físico cuenta más. 

En el Barça se sigue hablando muchísimo del estilo y del papel de sus centrocampistas. Esta temporada Valverde ha recurrido al 4-3-3 cuando parecía que había dejado su sello con la solidez del 4-4-2 la temporada pasada. ¿Es un equipo distinto?

Creo que a veces os fijáis más en los números que en la esencia del juego. Y yo creo más en la esencia de juego. El año pasado podía ser un 4-4-2 defendiendo. Pero realmente en ataque se parecía mucho más a un 4-3-3. Creo que los números no hacen  a los equipos. Los equipos los hacen los jugadores. Y que tiene más importancia el tipo de jugador  y sus características que si juegas con un sistema u otro.

Uno de los jugadores que seguramente marca más el estilo del Barça es Arthur, ¿crees que le da cosas parecidas a Xavi?

Yo creo que hay jugadores que son inigualables. Insustituibles. Xavi, Iniesta y Busquets, cuando no esté, van a ser jugadores únicos y casi imposibles de remplazar. Lo más importante también es que han mamado La Masia. Conocen perfectamente el juego de pases del Barça. Y eso un jugador que llega de fuera no lo va a tener por mucho que quiera. Arthur me parece un buen futbolista para jugar en la mediapunta, parecido al caso de Coutinho. Son dos jugadores de esos que llamamos diferentes.

Precisamente Coutinho es uno de los jugadores que más debate genera en el Barça sobre su posición. Para Machín, ¿es más centrocampista o delantero?

Donde lo ponga Valverde, porque nadie conoce mejor que él lo que es más beneficioso para su equipo. Si lo pone en una posición determinada, es porque claro donde va a rendir más.

Dembélé empezó la temporada a un gran nivel pero es un jugador que provoca muchas pérdidas y que ofrece su mejor versión con espacios; ¿crees que su perfil encaja en el estilo del Barça?

Dembélé está en un proceso normal de un jugador de 21 años. No le podemos pedir que esté a esa edad en su top y que lo haga todo bien. Hay que tener paciencia, pero en este mundo la paciencia no es la mayor de las virtudes. Y luego a todos los regateadores les pasa eso: se sienten más cómodos cuando tienen espacios. Pero me parece un jugador perfectamente adaptable al sello Barça. Es un extremo que maneja las dos piernas y que tiene desborde y velocidad. 

La temporada pasada te escuché decir que el Madrid tenía más jugadores determinantes que el Barça; ¿crees que ocurre lo mismo esta temporada?

[Se lo piensa] Eso es algo que dije en un momento en el que Messi aglutinaba la mayoría de goles y asistencias y que el Madrid tenía más diversificado los goles.

¿Hasta qué punto crees que está afectando al Madrid la baja de Cristiano?

Él siempre ha sido una bestia goleadora y ahora al Madrid se le achaca falta de gol. Por ahí es donde lo pueden estar echando de menos, pero esto del fútbol son dinámicas; volverán a golear porque tienen muchísimos jugadores con capacidad para marcar.

¿Para ti cual es la gran aportación de Valverde en este Barça? 

Sobre todo poner su sello, que al final lo que ha dado son títulos y una inercia ganadora. A partir de ahí creo que ha dado una consistencia defensivas al equipo. 

Con Guardiola tuviste una relación cercana durante tu etapa en el Girona; ¿ha sido una gran influencia?

Todas las conversaciones que tienes con gente de fútbol siempre son enriquecedoras y cuando lo haces con uno de los mejores entrenadores del mundo pues mucho más. Cada frase, cada palabra, cada momento con él ha sido de aprendizaje. Ahora es más complicado. Pero él siempre me ha dicho que habíamos hecho un gran trabajo en el Girona, que sea yo mismo, que continúe con mis ideas y que no es nadie para aconsejar a nadie.