De Ligt y De Jong brillan con Holanda

De Ligt fue uno de los nombres propios del encuentro

De Ligt fue uno de los nombres propios del encuentro / AFP

Albert Gracia

El Barcelona decidió enviar a Ramon Planes para que viera en directo a dos de los grandes valores del fútbol europeo y que suenan y mucho como futuribles para la primera plantilla azulgrana. Y lo cierto es que no solo no desentonaron sino que mostraron una madurez futbolística impropia de su edad.

De Ligt y De Jong firmaron un partido muy serio y lo sacaron con muy buena nota. El centrocampista del Ajax fue el timón de la Holanda de Koeman. Y eso, con 21 años, es mucho decir. Frenkie se hizo el dueño y señor del centro del campo de la ‘Oranje’ y mostró todas las virtudes por las cuales el Barcelona está tan interesado en incorporarlo.

Juego a uno o dos toques, destellos de calidad, pocas pérdidas de balón y la búsqueda insaciable de estar en contacto con el balón. Esas son las características por las que Frenkie se ha convertido en uno de los medios más codiciados de Europa. A todo esto, ante Alemania se le sumó su autoridad para no arrugarse en tareas defensivas y para comandar largos contragolpes con una poderosa zancada.

De hecho, interpretó a las mil maravillas la posición de pivote. Aun así, su juego menos posicional tiene más similitudes con Arthur que con Busquets . De Jong, que jugó 77 minutos, reúne las facetas de un interior azulgrana de la vieja escuela. 

Central de garantías

De Ligt también ofreció un encuentro para enmarcar. De jefe de la zaga junto a Van Dijk, el central del Ajax fue una auténtica pesadilla para la delantera alemana. Rápido al corte, con una salida limpia desde atrás, imponente en el uno contra uno y potente a la hora de rematar de cabeza. A sus condiciones defensivas, el ‘ajaccied’ también le sumó capacidad ofensiva, teniendo un cabezazo muy claro ante Neuer. Con tan solo 19 años, De Ligt es uno de los grandes centrales del futuro y ante Alemania lo dejó claro. 

Ramon Planes se habrá llevado una gran impresión de dos jugadores que debe tener bien controlados. Alemania sufrió en sus carnes a dos jugadores llamados a ser muy importantes en los próximos años. El futuro del fútbol europeo es suyo.