El líder quiere seguir su gran racha a costa del Levante

Aunque el Barça siempre es motivo de debate, juegue bien o juegue mal, la realidad es que el equipo de Ernesto Valverde, desde que tocara fondo en Granada(2-0) y se colocara octavo en la clasificación a cuatro puntos del Real Madrid, solo ha dado satisfacciones a sus socios y seguidores.Encadenar siete victorias consecutivas (cinco en Liga y dos en Champions League) no es nada sencillo y menos con la igualdad que se ha instalado en el fútbol profesional, donde los peces más grandes pueden ser comidos, perfectamente, por los más pequeños.

Guste más o menos el fútbol que viene desplegando el equipo azulgrana, desde la zozobra en Praga ante el Slavia (1-2) al disfrute ante el Valladolid (5-1), los números no engañan: veinte goles a favor por tan solo cuatro en contra.

Messi, sí; Dembélé, no

Sin duda, la gran noticia de estas semanas es la plena recuperaciónde Leo Messi, que nos dedicó el pasado martes todo el recital de fútbol ante el Valladolid. Con el argentino en plena forma todo se ve con otros ojos, con más optimismo. Por el contrario, ayer quedó confirmado, con su ausencia en la lista de convocados, que la consolidación de Ousmane Dembélé aún va para largo. Por decisión técnica, el francés se quedó en casa y no viajó a Valencia para medirse esta tarde al Levante (16,00 horas). Valverde vuelve a pasar por delante de él a Ansu Fati y a Carles Pérez, que regresa a la lista después de su lesión. Está muy claro que no se casa con nadie.

El Levante, que camina por la zona templada de la clasificación, pero no muy lejos de los puestos de descenso, no puede convertirse en otro Athletic o Granada. Es un rival asequible, al mismo nivel que Getafe y Eibar, donde el Barça ganó con absoluta y clara autoridad. Es decir, el equipo debe mantener la regularidad que le ha permitido estos siete triunfos consecutivos, no sin haber sabido sufrir, especialmente en los dos últimos duelos de Champions League frente a Inter y Slavia de Praga.

El equipo, además, debe aprovechar la bonanza del calendario, después del aplazamiento del clásico para el 18 de diciembre, y así superar el registro de triunfos consecutivos de Ernersto Valverde, establecido hace dos temporadas con nueve victorias. Si este Barça derrota a Levante, y en el Camp Nou a Slavia y Celta, lo superará.

A por Pep y Luis Enrique

Aquellos 18 partidos consecutivos ganados por el Barça de Rijkaard y Ronaldinho en la lejana temporada 2005-2006 parecen, hoy por hoy, muy difíciles de superar. No tanto, por supuesto, los nueve que estableció el propio Valverde en la 2017-18... y tampoco los registros de dos de los predecesores de Ernesto en el cargo, Pep Guardiola y Luis Enrique. Guardiola tiene su récord como entrenador azulgrana establecido en 10 partidos seguidos ganando (temporada 2010-2011) y Lucho en 11 encuentros (temporada 2014-2015). Estas dos marcas podrían caer muy pronto si el equipo azulgrana continúa manteniendo la regularidad que viene exhibiendo.