Èric Garcia pasa un examen en dos partidos

Xavi ha manifestado la necesidad imperiosa de que el Barça haga un esfuerzo importante para firmar a un mediocentro de garantías que pueda suplir a Busquets. Mientras no llegue, el técnico necesita buscar alternativas en casa y una de ellas pasa por Èric Garcia. No parece casualidad que fuera precisamente él quien sustituyera a Sergio ante el Mallorca.

Los últimos minutos ante los baleares sirvieron para que el de Martorell sumara su séptima presencia en el equipo como pivote. De ellas, solo dos veces ha disputado los noventa minutos, ante el Elche en el Martínez Valero (0-4), y ante el Valladolid (3-1) en Pucela.

Poco a poco, el defensa ha ido ganando protagonismo en esa posición y lo ha hecho animado por Xavi Hernández, que ha visto en él virtudes propias del perfil de centrocampista que necesita ahí y, de hecho, le había dado vueltas a esa posibilidad desde el inicio de la temporada. De ahí que en muchos entrenamientos le probara como pivote.

Dos pruebas

Èric Garcia tiene dos oportunidades para, más allá de que Xavi siga aspirando a futbolistas como Kimmich o Zubimendi, demostrarle que está ahí para lo que necesite y que, aunque nadie puede sustituir al cien por cien a Sergio Busquets, convertirse en un jugador que puede ejercer tanto de central como de mediocentro ofrece alternativas a la plantilla que la hacen más polivalente.

Todo apunta a que podría ejercer de pivote ante el Celta en Vigo y quizá también en Tokio ante el Vissel Kobe.