El Barça ya calienta motores para la Champions sin coronavirus y con Dembélé

Tras pasar los pertinentes test del coronavirus, que por cierto dieron negativo en todos los casos, la plantilla del Barça volvió al trabajo este martes en la Ciutat Esportiva. Después de gozar de unas mini-vacaciones para cargar pilas tras la finalización de la liga, el colectivo de Quique Setién retornó al tajo para preparar la Champions, el último gran reto de la temporada.

En el horizonte una fecha muy concreta: el 8 de agosto cuando los azulgranas -si la evolución de la pandemia del coronavirus no dicta lo contrario- deben recibir en el Camp Nou al Nápoles, en el choque de vuelta de los octavos final de la máxima competición continental (1-1 en la ida).

Estuvieron todos los que son  la única excepción de Arthur Melo no se ha presentado en la Ciutat Esportiva de Sant Joan Despí y tampoco piensa hacerlo en los próximos días, pues ha decidido acabar sus vacaciones en Brasil antes de incorporarse a la disciplina de la Juventus. Con este acto de indisciplina, el club le abrirá ahora un expediente sancionador..

La gran novedad del retorno fue la presencia de Osumane Dembélé, lesionado desde el pasado mes de febrero.  Además de Dembélé, también se ejercitaron sobre el césped, pero al margen de sus compañeros, Antoine Griezmann y Clement Lenglet, que también estarán listos para medirse al Nápoles tras superar ss problemas físicos.