El Barça arranca las negociaciones con los capitanes

El objetivo es que acepten una sensible rebaja en sus contratos para ajustar la masa salarial

Busquets y Jordi Alba se han pronunciado estos días y se mostraron dispuestos a negociar

Busquets: "Me gustaría que el club me dijera a mí las cosas y no enterarme por la prensa"

Busquets apuntó contra la dirigencia del Barça por la falta de comunicación directa en relación a su renovación y el recorte salarial que le solicitarían a la plantilla culé / Perform

SPORT.es

SPORT.es

El director de Fútbol del FC Barcelona Mateu Alemany, tiene una agenda repleta de asuntos pendientes y de la máxima urgencia para diseñar la mejor plantilla posible para Xavi Hernández de cara a la temporada 2022/23. Y uno de esos asuntos prioritarios es la desagradable tarea de abordar la rebaja salarial de los capitanes de la primera plantilla como parte de las medidas para ajustarse al fair play financiero.

El asunto ha estado latente en las últimas semanas y saltó a la plena actualidad durante la concentración de la selección española, con motivo de la disputa de las cuatro primeras jornadas de la UEFA Nations League. Desde allí, dos de los capitanes, Sergio Busquets y Jordi Alba, abordaron la cuestión en público, en el caso del primero ofreciéndose a dialogar pero destacando que, por el momento, el club no se había dirigido a ellos de manera directa.

También Alba mostró su incomodidad con la situación, más allá de que mostrara su predisposición a sentarse a hablar, mientras que el presidente Joan Laporta intentó rebajar tensiones elogiando públicamente que los capitanes se hayan mostrado dispuestos a realizar un esfuerzo. De hecho, la prórroga de contrato de uno de ellos, Sergi Roberto, ya ha sido con unas condiciones muy inferiores a las del contrato que expiraba el próximo 30 de junio y que se ha prolongado por una campaña más.

Ahora, queda por hablar con Busquets, con Alba y con Gerard Piqué, el cuarto de los capitanes y con el que, como en el caso de otros futbolistas que incluso ya no están en la plantilla, también hay pendientes las cantidades que se pospusieron en la anterior rebaja salarial.

El Barça necesita que se produzcan salidas, en forma de traspasos preferentemente, y si es de algún peso pesado mejor, para poder reforzar la plantilla después. Pero igualmente precisa que los jugadores con las fichas más altas acepten una rebaja. Así que a Mateu Alemany le tocará estos días la desagradable tarea de pedir a jugadores con una dilatada carrera en el Camp Nou que renuncien a buena parte de los pactos firmados en su día.