Andrés Iniesta, el clásico de los clásicos

Andrés Iniesta puede afrontar el domingo el último FC Barcelona – Real Madrid de su carrera deportiva, el preferido para cualquier futbolista culé o merengue. En el caso del capitán blaugrana es, además, el rival con el que más veces se ha enfrentado en competición oficial, junto al Atlético de Madrid: 37 presencias, que serán 38 de disputar el duelo del Camp Nou.

El centrocampista manchego, que en los cuatro partidos de Liga que le restan al Barça cerrará su dilatada y brillante carrera en el Camp Nou, ha sido un clásico en los clásicos de los últimos tres lustros. Unos enfrentamientos que se han producido en Champions, Copa del Rey, Supercopa de España y Liga con ‘Don Andrés’ como protagonista destacado en la mayoría de ellos.

Balance favorable

El balance de Iniesta en estos encuentros es favorable desde que se estrenó en aquel lejano choque del 20 de noviembre de 2004 en el Camp Nou. El Barça se impuso por 3-0 (goles de Samuel Eto’o, Giovanni Van Bonckhorst y Ronaldinho de Assís) y el entrenador Frank Rijkaard le dio entrada por Henrik Larsson (71’).

Desde aquel primer clásico de ‘Andresín’, como entonces apodaban al talentoso centrocampista manchego, luciendo el 24 en la casaca azulgrana, hasta este último que puede disputar ‘Don Andrés’ como propietario indiscutible del dorsal 6, van catorce años durante los cuales ha sentado cátedra futbolística como pivote, extremo, pero sobre todo como interior izquierdo, su posición preferida. 

En sus inicios, pareció que el manchego debía luchar contra los que dudaban de su capacidad debido a algunas de sus características que, en realidad, eran parte de sus virtudes. 

Superar obstáculos

Iniesta convenció a todos; también, a los que consideraban que tenía un cuerpo frágil que no estaba diseñado para el choque. Efectivamente, se trataba de un atleta liviano que necesitaba de su coordinación y agilidad para procesar a toda velocidad el fútbol que generaba su cerebro y explotar la movilidad, la asociación, el regate y el dinamismo que exigía el fútbol de posición del Barça. Una discreción y una humildad fuera de los terrenos de juego que le han mantenido al máximo nivel durante tantas campañas seguidas en un equipo de élite cosechando el reconocimiento de propios y extraños.

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La máxima expresión de todo ese fútbol, de todos esos éxitos de Iniesta, se resumen en su currículum en los clásicos entre Barça y Real Madrid. Su balance es de 16 victorias, 9 empates y 12 derrotas; balance que mejora si se repasa exclusivamente los choques jugados en la Liga (13 triunfos, 5 tablas y 7 derrotas); y que incluso es más favorable en el Santiago Bernabéu (8 triunfos, 1 empate y 4 derrotas).

Los tres pequeños

En esos 37 choques entre culés y merengues en los que ha participado, Andrés ha logrado 3 goles y ha repartido 8 asistencias, siendo más que protagonista en algunos de los memorables éxitos barcelonistas de los últimos tiempos. Por ejemplo, en el 2-6 de la campaña 2008-09 en el Bernabéu, cuando Andrés, Xavi Hernández y Leo Messi, ‘los tres pequeños’, se asociaron en el eje de la mediapunta para desarbolar al Real Madrid de Juande Ramos y sentenciar la Liga, camino del primer triplete en la historia del club.

También fue pieza decisiva en el 5-0 del Camp Nou de la Liga 2010-11, cuando asistió a Xavi el gol que abrió la lata y convirtió el clásico en un inmenso y eterno rondo barcelonista ante el Real Madrid de José Mourinho. La superioridad demostrada fue tal que la prensa internacional se planteó si Pep Guardiola había alumbrado el mejor equipo de la historia.

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En cuanto a los goles, el primero llegó en la vuelta de la Supercopa 2011-12. Acabó con victoria blaugrana por 3-2 y Andrés abrió el marcador en el minuto 15. Un duelo tristemente recordado por el ‘dedazo’ de Mourinho a Tito.

Los otros dos tantos se produjeron en la Liga. El centrocampista abrió el marcador (7’) en el 3-4 del campeonato 2013-14 que rubricó finalmente Messi con un ‘hat trick’. También consiguió la última de esas dianas en Chamartín, en el 0-4 de la Liga 2015-16. En esta ocasión, cerró el marcador tras los goles de Luis Suárez (2) y Neymar.