Xavi Pascual: “Nunca he tenido rabia contra el Barça”

El Barça - Dinamo de Bucarest de este jueves (20.45, Esport 3) será un partido especial por el regreso al Palau de un Xavi Pascual que ocupó el banquillo azulgrana desde 2009 hasta el pasado verano y que se despidió alzando la décima Champions. Será muy bien recibido, pero no debería ser un plebiscito.

El que fuera entrenador del FC Barcelona desde febrero de 2009 hasta el pasado verano con un espectacular balance de títulos con tres Champions como momentos culminantes atendió a SPORT en la víspera del choque de este jueves que supondrá su regreso al Palau como rival, algo que no sucedía desde 2003.

¿Qué tal le va en Bucarest?

Estoy muy a gusto. Me han recibido muy bien en la ciudad, en el club y en el país. Estoy muy contento y trabajando muchísimo para que dentro de un tiempo el Dinamo compita en la Champions con una mezcla de veteranos y de gente joven con mucha hambre. Hay que tener paciencia.

Pero... ¿aspiran a clasificarse para octavos?

Realmente no, pero si se plantea esa opción lucharemos con todas nuestras fuerzas para conseguirlo. 

¿Cómo valora sus tres partidos en la actual Champions?

Ante el Kielce jugamos en el pabellón pequeño, la gente nos ayudó muchísimo y se unieron un montón de cosas, porque ellos son muy superiores. En Paris no estuvimos a nuestro nivel y con el FC Porto es lo que nos espera, saber que iremos por detrás casi siempre, pelear y llegar a los últimos minutos con opciones. La actitud fue buena y perdimos por un gol. 

¿Recuerda qué sucedió el 26 de noviembre de 2003?

Hombre, pues... no sé (ríe).

Fue la última vez que jugó en el Palau contra el Barça (era portero del Academia Octavio).

¡Pues ya ha llovido bastante! A ver, supongo que las sensaciones serán extrañas. La gente me lo pregunta estos días, pero a día de hoy no siento nada. Imagino que cuando entre en el Palau será extraño, pero no estoy preocupado.

¿Cómo lleva pasar de un club de cinco estrellas a uno más ‘normal’ como el Dinamo?

No es una cuestión de estrellas, sino de que seas feliz y yo ahora estoy muy contento y muy agradecido con unas personas que se está volcando conmigo en Bucarest. Solo palabras de cariño para ellos.

¿Pesa ya más al agradecimiento al Barça por tantos años que la rabia por su extraña marcha?

Nunca tuve rabia. ¡Nunca! ¿Cómo voy a tener rabia al club que me ha dado de comer y que ha estado siempre conmigo? Hubo un período electoral, la gente toma sus decisiones y tengo que respetarlo como socio. Y así lo hice.

¿Está viendo los partidos del Barça esta temporada?

Claro. He visto todos los de Champions y casi todos los de la liga además porque son rivales nuestros, pero ahora tengo cosas más importantes, sobre todo hacer que mi equipo funcione. 

¿Y qué le pareció el KO ante el Magdeburgo en la Super Globe?

Se sabía que el Magdeburgo es equipazo que ha empezado muy fuerte y que era posible perder. A estos niveles la derrota está siempre ahí.

Su Barça también perdió una final muy dura ante el Kiel en la Champions de 2019-20...

Admitir que hay equipos que te pueden ganar no es rasgarse las vestiduras, es realismo puro. Es normal que te pueden ganar. Lo normal es no ganarlo todo.

"Buscaba a alguien que nos diese continuidad. ‘Gurbi’ (Gurbindo) es un jugador extraordinario que nos dará esa pausa

Acaban de fichar a Gurbindo, otro exazulgrana. ¿Qué les aportará?

Somos demasiado directos y buscaba a alguien que nos diese continuidad. ‘Gurbi’ es un jugador extraordinario que nos dará esa pausa. Además, puede jugar en varias posiciones y defender en el dos. 

¿Y qué me dice de Sorhaindo y de su hijo Àlex?

A Cédric ya lo conocéis. Nos está dando un plus increíble. Y Àlex sigue con su evolución y está jugando bien, con minutos y confianza. 

"Nosotros no podemos correr como el Barça. Hay que ver lo que tenemos y tratar de sacarle el máximo rendimiento"

¿Intentará clonar al Barça en su Dinamo o eso sería una tontería?

Tú tienes que adaptar el juego a lo que tienes. Nosotros no podemos correr como el Barça. Hay que ver lo que tenemos y tratar de sacarle el máximo rendimiento. Ojalá pudiésemos hacer un balonmano mucho más rápido y más vivo, pero si no se puede, no se puede. Hay que alcanzar el listón más alto en función de las posibilidades.

¿Qué recibimiento espera?

Pues no lo sé. Imagino que hay gente que me aplaudirá y otros que no. El Palau me trató siempre muy bien y guardo un gran recuerdo de mis últimos partidos como entrenador del Barça. Ya veremos.

Acabemos. ¿Qué les diría?

La afición es muy sabia, siempre ha apoyado al equipo cuando lo ha necesitado y les pediría que lo sigan haciendo. Estoy seguro que lo harán. El Palau es una de las pistas más temidas y ahora lo sufriremos en nuestras carnes.