BALONMANO-CHAMPIONS LEAGUE

Un colosal Joan Cañellas convirtió el 'milagro' en una quimera

El Barça Lassa estuvo a tan solo un gol de culminar una espectacular remontada tras perder por 15-19 bien entrada la segunda mitad. Se situó 31-26… pero ahí apareció Cañellas y se acabó todo.

El Barça no logró el pase a la Final Four pese a realizar un gran partido

El Barça no logró el pase a la Final Four pese a realizar un gran partido / sport

DAVID RUBIO

No pudo ser, aunque hay que quitarse el sombrero ante la segunda parte de un Barça Lassa que llegó a creer en el milagro cuando parecía imposible. De perder 15-19 en el 35’ pasó a situarse 31-26 a falta de cinco minutos antes de que dos golazos de Joan Cañellas clasificaran al THW Kiel (33-30… faltaron tres goles).

Aunque de dimensiones más reducidas, el Palau Blaugrana no tuvo ayer nada que envidiar al Sparkassen Arena. Hasta los aficionados tuvieron esos famosos abanicos que los alemanes hacen sonar durante todo el partido como auténticos autómatas.

Por tanto, la presión del Palau fue máxima desde el pitido inicial. Y eso que las cosas empezaron francamente mal. Con una rocosa defensa que contó casi siempre con el beneplácito arbitral, el THW Kiel llevó el paso del partido en los primeros minutos.

Con el serbio Marko Vujin muy ‘enchufado’, los germanos tomaron tres goles de renta en el 7’ (1-4) mientras los azulgranas se mostraban demasiado tensionados en ataque. Sin embargo, dos tantos de Raúl Entrerríos sirvieron para equilibrar el marcador cinco minutos después (5-5).

Al paso por el 17’ llegó un momento importante. Un excelente Edu Gurbindo firmó la primera ventaja local (7-6) y en la siguiente acción el genial Nicklas Landin detuvo un penalti a Kiril Lazarov. Fue la única vez en todo el primer acto que el Barça Lassa pudo marcharse por dos tantos.

Lejos de ello, el Kiel aprovechó la exclusión de un muy mercado Filip Jicha para recuperar la delantera (8-9). Desde ahí hasta el descanso, se mantuvo una peligrosa tónica de goles por ambos bandos que aventuraba cada vez que no bastaría con ganar por cinco goles (13-14 al descanso con un tanto final de Vujin).

El comienzo del segundo acto supuso la puntilla para el conjunto azulgrana. El empate a 14 obra de Entrerríos precedió a tres tantos visitantes obra de Vujin, Brozovic y Klein (14-17 en el 33’) que obligaron a Xavi Pascual a pedir tiempo muerto para frenar la hemorragia.

Al regreso, Landin respondió con otro paradón y Klein se inventó un sensacional tanto (14-18) que dejaba la Final Four ¡a 10 goles del Palau! Parecía todo perdido, pero ahí emergieron Aitor Ariño y el recién incorporado Gonzalo Pérez de Vargas para liderar un parcial de 5-1 que situó el marcador en un esperanzador 19-19 en el 39’.

En un abrir y cerrar de ojos, el Barça volvió a creer en sus posibilidades y recuperó su mejor versión ante un Palau entregado. Tras cinco goles por cada bando que obligaban ya a los azulgranas a ganar por seis goles, los de Xavi Pascual se lanzaron a tumba abierta a por su rival por primera vez en toda la eliminatoria.

Con Pérez de Vargas estelar y con Jallouz en racha, el Barça completó un parcial de 14-16 y se situó a dos goles de Colonia (29-25 en el 47’). Y aún estuvo más cerca cuando Sigurdsson estableció el 31-26 y el Kiel atacó en inferioridad por la exclusión de Vujin.

Pues bien, ahí apareció un magistral Joan Cañellas para anotar tres goles consecutivos y meter a los suyos en la Final Four. Por lo visto, sus serios problemas físicos de espalda vuelven a ser historia en beneficio para el balonmano. Y culminó el pase germano Landin con tres intervenciones sensacionales.

Lo dicho, al final 33-30, victoria insuficiente del campeón, que cederá su trono pese a que cayó con honor. Los problemas han sido el mal partido de ida y los nervios que atenazaron ayer a un Barça que solo creyó cuando lo vio perdido… y estuvo a punto de obrar una machada histórica.