Mercedes-AMG CLA 45 4MATIC, un deportivo de dos caras

Que tanto adultos como los más pequeños se giren a tu paso ha dejado de ser habitual, a no ser que conduzcas superdeportivos llamativos o modelos bellos sin concesiones como es el caso del Mercedes-AMG CLA 45 4MATIC Coupé. Su larga denominación es equiparable a la lista de sensaciones que ofrece una berlina capaz de superar una semana entre el tráfico urbano, recorrer cientos de kilómetros y batir cronos el fin de semana. Todo ello sin mostrar más flaquezas que las propias de su silueta y la potencia que esconde bajo el capó, nada más y nada menos de 381 caballos.

La firma de la estrella actualizó el CLA en 2016 pero mantuvo sus cotas de 4,69 metros de largo, 1,77 metros de ancho y 1,41 de alto. Su batalla es de 2,69 metros y pese a ser un vehículo de cinco plazas, el espacio trasero es de los pocos inconvenientes que le encontramos. El maletero tampoco es su punto fuerte con 470 litros de capacidad en la versión coupé. Ambos parecen motivos de peso a la hora de decidir entre esta carrocería o la Shooting Breake, con 495 litros de maletero y más altura para los pasajeros de atrás, pero la parte emocional del diseño es (todavía) clave a la hora de comprar.

El modelo probado lucía ciertos extras que incrementaban el lado más racing de su doble personalidad: familiar y radical. El paquete AMG Night incorpora listones en las entradas de aire, faldones, llantas radiales de 18 pulgadas y línea de cintura de color negro así como los embellecedores de las salidas de escape cromados en negro. Un plus de carácter que cuesta 987 euros y que, personalmente, pagaría encantada con tal de mirar con lujuria el frontal de doble lama tan característico de los modelos AMG y regodearme en su sensual silueta. Los grupos ópticos Led High Performance son de serie para esta versión.

LOS PAQUETES, SU MEJOR BAZA

Su interior refleja a la perfección el espíritu versátil del su estética exterior. Los detalles del paquete exclusivo AMG le dan el toque cardiaco a su sobrio diseño pero destacan, sin duda, los asientos tipo Recaro de cuero negro Red Cut con costuras de contraste en color rojo que llegan con el AMG Performance (2.778€), una combinación que se repite por todo el habitáculo: volante, puertas, apoyabrazos e incluso en los embellecedores circulares del aire. Mención especial merece la palanca del cambio automático con el sello Affalterbach, detalles que marcan la diferencia frente a otros que envejecen su interior. El cuadro de mandos, la botonería y el volante multifunción sufren el paso de los años y parecen bastos entre tanta delicadeza.

Enredarse en su sistema de infotaintment es fácil y todavía no es tan intuitivo como el de sus rivales del grupo Volkswagen, algo superado en la nueva hornada de vehículos. Cargado hasta los topes de equipamiento tecnológico, lo cierto es que apenas haces uso de él cuando buscas conducir y disfrutar de unas prestaciones que hablan por sí solas. En nuestro caso, la unidad probada traía consigo la friolera de 16.000 euros (o más) en extras.

PRESTACIONES 

Es increíble ver como los fabricantes son capaces de exprimir un bloque como el de este Mercedes-AMG CLA 45 4MATIC. Sus cuatro cilindros y el turbo rinden una potencia de 381 caballos con un par máximo de 475 Nm desde las 2.250 revoluciones por minuto hasta pasadas las 5.000 rpm. Los datos nos adelantaron lo elástico que podía llegar a ser pero solo lo comprendes realmente cuando circulas (a cualquier velocidad) y hundes el pie, su respuesta es inmediata a no ser que vayas en Confort. Sin llegar a ser aburrido ni de lejos, este modo de conducción configura los reglajes para hacer del viaje un paseo relajado. El cambio entre modos –existen también el Sport, Sport+ e Individual- es de agradecer en cuanto te dispones a recorrer un tramo de curvas.

La tracción total 4MATIC reparte electrónicamente el envío de fuerzas hasta conseguir un 50/50, mientras tanto se podría decir que es un delantera reajustado para ser más rígido que las variantes convencionales. Además, se puede incorporar el autoblocante del eje delantero por 3.190 euros. La caja de cambios automática AMG Speedshift de 7 velocidades fluye de marcha en marcha sin apenas percibirse y pequeñas las levas tras el volante ofrecen todo el poder de decisión en los modos más exigentes.

SENSACIONES AL VOLANTE

Sentarse en sus asientos ya supone un impulso directo a la esencia más animal del conductor, todo incita a sacar lo mejor de sus posibilidades. Al despertar su bloque descubrimos un sonido gutural pero sin ser exagerado, un refinamiento que también se traslada a la conducción en modo Confort. Sin duda, una de las puntas de lanza del Mercedes-AMG CLA 45 4MATIC Coupé es la capacidad de viajar con tu abuela y tus mejores amigos a la vez, viajes que (todos sabemos) se realizan de formas muy distintas.

Una vez eliges dejar atrás el piloto automático del punto A al punto B, este cupé deja a un lado su fachada para rebelarse como un deportivo de carrocería señorial. Equilibrado y sincero en todos los aspectos hace de cualquier conductor un as del volante, con el riesgo que ello conlleva y que soluciona su increíble frenada. El paso por curva padece de cierto sobrepeso pero es insignificante frente a su estabilidad y la actuación milimétrica de su 4MATIC. La dirección se endurece de manera significativa así como sus suspensiones y el sonido de escape, con algún que otro petardeo que te saca una sonrisa inconsciente.

Poco preocupará a su propietario su consumo si se compra un vehículo que sale en 65.800 euros pero se dispara rápidamente hasta los 80.402 euros de la unidad probada. Un gasto de 8,6 litros a los cien kilómetros no nos parece exagerado teniendo en cuenta el entorno de la prueba, básicamente carreteras convencionales y poca vía rápida.