Una máquina superlativa

Especie en peligro de extinción: deportivo extremo, más de 700 CV con motor de combustión, aceleración de cero a 100 kilómetros en menos de tres segundos y velocidad máxima de 350 kilómetros por hora. Esas son las credenciales del <strong>Lamborghini Aventador S</strong>, un cupé radical de los que ya casi no quedan, pues, hoy en día, pocos deportivos de su clase no recurren a una mecánica híbrida para alcanzar cotas de potencia tan altas.

El Aventador S es el reemplazo del Aventador, el modelo que <strong>Lamborghini </strong>lanzó en el 2013 y del que presentó, dos años después, una variante casi destinada únicamente a circuito (Aventador SV). El primero ofrecía 700 CV, mientras que el segundo llegaba a 750 CV. Ahora, el Aventador S se conforma con 740 CV gracias a un motor V12 de 6,5 litros de cilindrada con stop&start y sistema de desactivación de cilindros para reducir el consumo. Este propulsor, una evolución del que llevaba el modelo anterior, va asociado a una transmisión automática manual pilotada de siete velocidades.

RUEDAS DIRECTRICES

Junto al nuevo motor, el Aventador S se distingue del Aventador por ligeros ajustes en el diseño exterior, encaminados no solo a actualizar su imagen, también a mejorar su aerodinámica, modificar la suspensión e incluir un nuevo sistema de cuatro ruedas directrices. Todo ello con el objetivo de seguir siendo referencia entre los deportivos más exclusivos y potentes del mercado, como el <strong>Ferrari F12berlinetta (740 CV)</strong>, el próximo Ferrari 812 Superfast (800 CV) y el McLaren 675LT (675 CV).

El nuevo modelo de la casa de Sant'Agata Bolognese presenta el paragolpes, el difusor, el alerón y el carenado inferior renovados. El alerón cuenta con un sistema que cambia la altura, con tres posiciones diferentes, en función del modo de conducción y la velocidad a la que se circula. Hay cuatro programas de conducción disponibles: Strada, Sport, Corsa y Ego (personalizable). Dependiendo de uno u otro, varía la respuesta del acelerador, el sistema de tracción total, la transmisión, la dirección y la suspensión. Cuanto más deportivo es el modo de conducción, más par disponible en el eje trasero.

El  nuevo Aventador S es el primer modelo de producción de la firma transalpina con dirección a las cuatro ruedas. Funciona de forma que, a baja velocidad, las ruedas posteriores giran en sentido contrario al de las delanteras para así incrementar la agilidad, mientras que, a alta velocidad, las cuatro ruedas se mueven en el mismo sentido, aumentando la estabilidad lineal.

BIEN CALZADO

Otra novedad en el superdeportivo italiano es la modificación del software que controla el control de estabilidad, mejorando la capacidad de tracción y con mayor fuerza en el eje trasero para generar así un mayor sobreviraje. Las llantas son de 20 y 21 pulgadas, con neumáticos Pirell P Zero fabricados en exclusiva para el Aventador S.

En el habitáculo hay menores variaciones, con un diseño renovado para la instrumentación, que ahora se muestra mediante una pantalla TFT, y un nuevo sistema multimedia con Apple CarPlay y telemetría (opcional) para cuando se rueda en circuito. Ad Personam, el programa de personalización de Lamborghini, permite configurar un interior a medida, eligiendo entre un sinfín de guarnecidos, tapicerías y colores.

El nuevo Aventador S ya se comercializa a partir de 382.211 euros. Un capricho superlativo.