Ramón Cid deja la Federación Española de Atletismo

Ramón  Cid

Ramón  Cid abandona su cargo en la RFEA / EFE

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Ramón Cid Pardo, antiguo saltador de triple, anunciará este viernes que deja la dirección técnica de la Federación Española de Atletismo después de seis años en el cargo, según han confirmado fuentes federativas.

Cid, de 64 años, asumió las tareas de seleccionador en 2013, coincidiendo con la última victoria de José María Odriozola en las elecciones a la presidencia, y fue confirmado en el cargo hace dos años cuando Raúl Chapado fue elegido presidente.

Tuvo el récord de España de triple salto con una marca de 16,69 que todavía es la undécima de la historia, después de 38 años. Logró trece títulos de campeón de España (8 al aire libre, 5 en pista cubierta), fue 45 veces internacionales -dos olímpico (decimosexto en Montreal'76, decimotercero y Moscú'80)- y como júnior llegó a ser subcampeón de Europa en 1973.

"Una monumental cagada". La expresión no dejaba la menor duda sobre la asunción total de responsabilidades por parte del director técnico de la Federación Española, Ramón Cid, cuando en marzo pasado Carles Castillejo, por un error del cuadro técnico sobre el reglamento, tuvo que ser sacado del equipo español que iba a competir en los Mundiales de Medio maratón de Valencia.

La confesión pública, clara y patente de un error suponía una cierta novedad en la Federación Española y ratificaba el carácter llano y abierto de un seleccionador que introdujo el "buen rollo" en el seno de la selección española, que había vivido momentos convulsos con los casos de dopaje más famosos.

Asumió el error y pidió perdón a los atletas perjudicados con la nobleza de un guerrero medieval. A lo largo de sus seis años en el cargo, Ramón Cid siempre dio la cara, atendiendo con amabilidad a todos los requerimientos y lidiando con los egos de atletas y entrenadores.

Este viernes comparecerá en la Federación Española de Atletismo junto al presidente, Raúl Chapado, para anunciar que deja el cargo después de seis años.

Donostiarra de 64 años, Ramón Cid congregó un amplio consenso en los estamentos del atletismo para asumir en 2013 la dirección técnica de la Federación Española que hasta entonces había ejercido el presidente federativo, José María Odriozola.

Su forma de relacionarse con atletas, entrenadores, oficiales y periodistas ejerció un fuerte contraste con el carácter a veces bronco de Odriozola, que no tenía empacho en formular severas críticas contra atletas que, a su juicio, habían fracasado en grandes campeonatos.

Por el contrario, Cid jamás elevó el tono. Sus maneras y hasta su voz susurrante contribuyeron a crear un buen ambiente en la selección española, enrarecido en otros tiempos por la presencia en el equipo de atletas vinculados con casos de dopaje.

Saltador de triple trece veces campeón de España que llegó a ser plusmarquista nacional con una marca de 16,69 metros -todavía undécima española de la historia, después de 38 años-, Cid, dos veces olímpico y con 45 presencias en la selección como atleta, ha sabido gestionar como director técnico la transición entre la generación abanderada por Ruth Beitia y la nueva ola encabezada por el mediático Bruno Hortelano.

Ya tuvo muchas dudas sobre la conveniencia de seguir en el cargo cuando Raúl Chapado fue elegido, hace dos años, sucesor de Odriozola como presidente de la Federación pero decidió seguir "partido a partido", consciente de que no acabaría la legislatura.

El éxito de la selección española en los Europeos de Berlín, en agosto pasado -diez medallas, veinticinco finalistas y un quinto puesto en la clasificación por puntos-, llevó a Cid a dar el paso definitivo de abandonar el puesto.

Antes de seleccionador había sido, desde 1989, responsable de saltos en el Comité Técnico.

Casado y con tres hijos -dos de ellos atletas-, Ramón Cid es licenciado en Ciencias de la Actividad Física y, como entrenador, tiene a su cargo a un grupo de atletas en San Sebastián.