Herrera, llegar y besar al Cholo

Santificado por los atléticos. Elevado a los altares por una afición que le idolatra. Diego Pablo Simeone es el guía espiritual de los rojiblancos. Su palabra es dogma. El cholismo es religión. Y Héctor Herrera sigue al pie de la letra los mandamientos de su técnico. El mexicano ha sabido tener la paciencia del santo Job. Cuatro partidos de Liga, ni un minuto de juego.

Esperaba su oportunidad para dar la razón a los que veían en él un centrocampista con ADN colchonero. Hasta el miércoles ante la Juventus. El ex del Oporto salió al terreno de juego en sustitución del renqueanteThomas y catorce minutos después llevaba el delirio al Wanda Metropolitano con el empate ‘in extremis’ ante los piamonteses. 

Herrera dejó su tarjeta de presentación. Ahora está en manos de Simeone creer en su discípulo. Por devoción no será.

Morata no llega al Celta

El delantero continúa evolucionando favorablemente de su esguince en la rodilla derecha. Ejercicios en solitario sobre el césped para fortalecer la zona dañada y contacto con el balón. El madrileño no quiere forzar la máquina y sólo volverá cuando esté plenamente recuperado. Su presencia en el duelo del sábado ante el Celta de Vigo en Canillejas parece más que improbable.

Quien sí estará ante los celestes será Thomas Partey. El ghanés realizó la sesión de recuperación justo al resto de compañeros, por lo que su lesión ante la ‘Vecchia Signora’ se quedó en un mero susto. Un entrenamiento donde la pelota tuvo un papel protagonista. Posteriormente, los titulares acabaron en el gimnasio. 

Simeone citará mañana viernes a su plantilla al completo para la que será única preparatoria de cara a pergeñar la táctica a seguir ante el conjunto de Fran Escribá.