Quartararo profana el templo de Marc Márquez

El francés ganó en Sachsenring, escenario donde siempre había ganado el piloto de Honda desde 2013. Quartararo ha dado un golpe en la general de MotoGP

betfair

Cada vez hay menos gente que pueda negarlo. MotoGP tiene un nuevo rey y este responde al nombre de Fabio Quartararo. El francés, vigente campeón de la categoría, va camino de encargar su segundo título consecutivo tras dar un golpe de autoridad en el circuito de Sachsenring. El piloto de Yamaha se impuso con claridad escapándose en las primeras vueltas aprovechando una caída de Peco Bagnaia, quien dilapidó todas sus opciones de Mundial sumando otro cero a su casillero.

Quartararo no encontró oposición en una carrera. Su impulso inicial no lo pudo seguir un Aleix Espargaró que va perdiendo fuelle en la segunda posición del Mundial hasta ver a su rival francés a 34 puntos tras cosechar en esta carrera un cuarto puesto. Al piloto de Aprilia le precedieron dos pilotos de Ducati con ganas de reivindicarse.

Por un lado, Zarco prolongó su maldición como el piloto con más podios en la historia de MotoGP sin haber conseguido estar en lo más alto con otro segundo puesto, mientras que Jack Miller -que se irá a KTM la próxima temporada- terminó tercero tras hacer un espectacular remontada después de verse penalizado con una 'long-lap'. Es cierto que el australiano contó con ayudas para sus propósitos en forma de múltiples abandonos. Maverick Viñales, que iba cuarto, destrozó la suspensión trasera de su Aprilia quedando fuera de la ecuación en la recta final de la carrera.

Quien sí terminó fue un Enea Bastianini que sigue siendo una auténtica moneda al aire 'La Bestia' alterna victorias en carrera -lleva tres, las mismas que Quartararo- con resultados decepcionantes como un décimo en una carrera que fue un suplicio para las Suzuki y sobretodo para Honda. La marca nipona, que no pudo contar con Marc Márquez por lesión, sólo vio terminar a un único piloto con sus siglas y fue el alemán Stephan Bradl, quien fue el último de carrera quedándose sin puntos en el decimosexto puesto.

El Mundial pone rumbo a la 'Catedral', al circuito holandés de Assen, teniendo claro que Quartararo es el hombre a batir en lo que queda. El francés no cuenta ni mucho menos con la moto más rápida ni la más ágil, pero sí con un ritmo endiablado que hace sus rivales no puedan alcanzarle en cuanto mete la directa. El piloto de Yamaha se ha ganado por méritos propios el cartel de sucesor de Marc Márquez tras profanar su circuito más arraigado.

Una de las cosas más llamativas del bueno de Quartararo ha sido su tesón a la hora de creer en sus opciones. No fue ni campeón de Moto3 ni Moto2 -donde apenas ganó una carrera- para ascender a MotoGP y a partir de ahí empezó a volar como uno de los más rápidos de la categoría. Se estrenó en su año de novato con siete poles, pero no tenía la consistencia de la que ahora dispone. Sus rivales saben que a sus 23 años es difícil que no marque una época. Hay campeón para rato.