Play-off Liga Endesa

Un triple de Sergio Llull decide el triunfo del Madrid en la prórroga

El Real Madrid se impuso en la prórroga en la pista del Valencia (100-103) gracias a un triple de Sergio Llull en un duelo que se resolvió en los cinco minutos suplementarios. El Valencia, que tuvo el triunfo en la mano después de una polénica canasta anulada a Harandogy, está a un partido del KO en semifinales

El Madrid se impuso en la prórroga y ya está muy cerca de la final de la Liga Endesa

El Madrid se impuso en la prórroga y ya está muy cerca de la final de la Liga Endesa / sport

RAMON PALOMAR

El Valencia, que venía de ganar en la pista del Madrid y con la opción de decidir ante su afición, le vino grande el primer cuarto en La Fonteta. Completamente descentrados, sin intensidad defensiva y sin acierto en el tiro, el conjunto de Pablo Laso se paseó en los primeros 10 minutos, con un protagonista especial, Felipe Reyes.

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Liga Endesa - Playoff

100
103
Alineaciones
Valencia Basket
(18+22+30+18+12): Van Rossom (14), Sato (9), Rafa Martínez (4), Harangody (21), Lishchuk (4) -cinco inicial-, Nedovic (5), Lucic (8), Dubljevic (13), Guillem Vives (17) y Pablo Aguilar (5).
Real Madrid
(26+13+25+24+15): Rivers (5), Llull (12), Rudy Fernández (20), Felipe Reyes (21), Ayón (13) -cinco inicial-, Nocioni (7), Maciulis (2), Sergio Rodríguez (7), Carroll (5), Slaughter (9) y Mejri (2).

El MVP de la Liga Endesa empezó como un rayo y tras dos triples, y otro más de Rudy, dio la primera renta importante a los suyos: 5-11. Los locales no reaccionaron y el Madrid, acertado en los triples y sin defensa de los locales, llegó a irse de 11 puntos: 15-26. La valoración hasta ese momento explicaba a las claras lo visto en el campo: 2 puntos para el Valencia, por 35 del Madrid. Un triple de Vives dejaba el primer cuarto en un contundente 18-26.

Aunque el partido cambió por completo en el segundo. Aguilar dio cinco puntos consecutivos al Valencia, que animó a los suyos (23-26) y Vives redujo la diferencia a uno, con un parcial de 13-2. El Madrid dejó de anotar con facilidad y la defensa del equipo de Carles Durán subió su intensidad. El Madrid trataba de reaccionar (25-31), pero el cuadro de Laso ya no transmitía las mismas sensaciones de seguridad, permitiendo que el Valencia llegara a ponerse por delante (34-33). La Fonteta vibraba de nuevo con los suyos, viendo que era posible darle la vuelta al partido. Y en esa dinámica favorable a los locales se llegó al descanso (40-39). Un parcial para el Valencia de 22-13 renacía la esperanza de ponerse por delante en la semifinal.

En la reanudación, el duelo ganó en intensidad. Y el que mejor supo interpretarla fue el Valencia Basket, consciente que tenía una oportunidad única de meter en aprietos al Madrid. Van Rossom y Vives cogieron el timón del equipo y lograron mantenerse por delante en el electrónico aunque con pequeñas ventajas. El Madrid perdió la frescura ofensiva, pero gracias a los tiros libres y a un efectivo Ayón (13 puntos), logró mantenerse cerca del Valencia. En un tirón final de los locales, el conjunto ‘taronja’ abrió su máxima renta y el sueño de victoria (70-64).

Liderados por un gran Guillem Vives (17 puntos), el Valencia seguía controlando el partido e incluso llegó a dominar por dos dígitos (76-66). Los minutos iban pasando y el Madrid no encontraba la manera de hacer daño. Aunque Laso encontró la solución en una zona, que se le atragantó al Valencia. Un parcial de 0-8 acercó a los blancos y Laso mantuvo esa zona 3-2 hasta el final. Felipe Reyes recuperó el protagonismo del primer cuarto y gracias a los tiros libres, metió al Madrid en el partido, que se iba a decidir en los últimos instantes.

En la última acción, el Valencia apuró la posesión y en el último suspiro anotó Harangody, para el delirio de La Fonteta que parecía sentenciar el duelo. Pero los árbitros revisaron la acción y ante la incredulidad de La Fonteta, decretaron que había sido fuera de tiempo. El partido se iba a la prórroga (88-88).

En el tiempo suplementario, el Valencia trató de mantenerse vivo y lo logró hasta el final con un triple de Guillem Vives (100-100). Quedaba un ataque y el Madrid movió el balón hasta que cayó en manos de Llull, que se jugó un triple y acertó para sentenciar el partido y recuperar la ventaja de pista (100-103) y a un solo triunfo de la final de la Liga Endesa.