Análisis Barça Lassa: Cortocircuitados

Hanga y Heurtel, dos de las caras nuevas de este Barça Lassa

Hanga y Heurtel, dos de las caras nuevas de este Barça Lassa / JAVI FERRANDIZ

Sergio Vera

Sergio Vera

De la euforia a las dudas en una semana. En una realidad en la que se disputan 5 partidos en tan solo 9 días todo puede cambiar para bien o para mal en un corto período de tiempo. Los resultados pesan y este Barça Lassa arrastra ahora una racha negativa de cuatro derrotas consecutivas que han convertido en un examen de fiabilidad el partido de este domingo ante el UCAM Murcia en el Palau.

El Barça Lassa necesita recuperar el crédito y la moral tras una última semana nefasta donde las sensaciones no han sido positivas y algunas de las carencias del equipo han salido a la luz.

Todos los protagonistas directos apuntan claramente en una dirección: la consistencia defensiva. "Hemos perdido un poco la identidad de lo que quiere ser este equipo y cómo queremos defender. No estamos siendo consistentes. En ataque estamos encontrando tiros cómodos y jugando fluido pero la pelota no está entrando en algunos momentos. El problema está atrás. No estamos los 40 minutos activos como contra el Panathinaikos o Baskonia (...) Esa es la culpa de por qué el equipo no está jugando al máximo nivel", analizó <strong>Pierre Oriola.</strong>

FRAGILIDAD DEFENSIVA

FRAGILIDAD DEFENSIVALos azulgranas han pasado de encajar 72.4 puntos en sus seis primeros seis compromisos, todos ellos saldads con triunfo, a los 77.5 puntos de las últimas cuatro derrotas. Aunque más allá de la frialdad de los números está la sensación de haber reducido un escalón el nivel de actividad y energía defensiva.

Demasiadas concesiones en el uno contra uno y problemas en el juego interior para defender el bloqueo directo y las continuaciones interiores para Séraphin y Tomic. El último cuarto de Theodore en el encuentro en Milan o los problemas para frenar a Micic en el duelo ante el Zalgiris son una muestra. En un equipo que pretende correr y hacer del juego en los primeros segundos de ataque su seña de identidad es imprescindible mostrarse sólido y contundente atrás para tener oportunidad de correr.

DIFICULTAD EN ESTÁTICO

DIFICULTAD EN ESTÁTICOPrecisamente por ello el cortocircuito ha sido todavía mayor a nivel ofensivo donde el equipo ha pasado de anotar 94 puntos por encuentro en sus seis primeros partidos a los 76 de las últimas cuatro citas.

Si bien es cierto que la exigencia de los duelos de la última semana ha sido mayor, el equipo ha mostrado notables problemas en la dirección, especialmente con Pressey al mando, y cuando no ha conseguido correr a campo abierto ha tenido problemas para anotar con fluidez. Tampoco en situaciones de tiros rápidos ha encontrado el acierto de las primeras semanas descendiendo el porcentaje en tiros de tres del 44% (59/132) al 32% (28/87). Además, jugadores como Koponen deben dar un paso al frente en la anotación tras un primer tramo de temporada discreto.

APAGÓN EN EL '4'

APAGÓN EN EL '4'En este sentido, la posición de '4' abierto es de vital importancia por los espacios que se generan, la amenaza ofensiva que representan y las posibilidades defensivas que ofrecen facilitando los constantes cambios. Y tanto Moerman como Vezenkov no han brillado a su mejor nivel. El francés, que admitió haber sufrido un bache en su juego, apagó su luz y acierto de las primeras citas sobre todo en la anotación (6.25 puntos por encuentro en las cuatro derrotas), aunque más llamativo es el caso de un Vezenkov que en Euroliga apenas cuenta: 2.5 puntos en 10 minutos de juego.

Pese a todo, desde el seno del equipo están convencidos de poder darle la vuelta a la situación. El propio Oriola lo dejó claro: "Tenemos margen de mejora y hemos demostrado el camino de donde queremos llegar. Toca volver a tener las ideas claras. Hemos tenido poco tiempo para entrenar y tenemos que recuperar el nivel defensivo de las primeras semanas", comentó.