GOL A GOL

La paciencia de Messi

Xavier Torres

ADIÓS A EUROPA y también a la Copa, y casi a la Liga. Este es el balance de la semana trágica del Barça, la que ha hecho visible un escenario tan previsible que a muchos culés ni les ha extrañado. El equipo de Martino se ha desmontado para ponerse a la altura del club, imputado por la Audiencia Nacional, sancionado por la FIFA y deprimido por culpa de un proyecto revanchista que ha enterrado la mayoría de las esencias de un Club que hasta hace cuatro días era la referencia mundial del sector.

Y ahí, en medio de la nada y como ejemplo de la caída, aparece Leo Messi señalado por los de arriba para evitar que la avalancha los arrastre a ellos. Que el 10 no ha hecho un buen final de temporada es evidente. Ni Xavi, ni Piqué, ni Mascherano, ni Neymar, ni Busquets, ni Cesc, ni Alexis, ni Alves… Tal vez acabaríamos antes salvando sólo a Iniesta. Demasiados afectados para obviar un evidente problema futbolístico. Y lo peor es que todo se veía venir y nadie ha hecho nada para evitarlo.

En el caso de Messi esta tribuna viene denunciando desde el 1 de marzo (el de hoy es el cuarto artículo) el vergonzoso trato recibido por el 10 en las negociaciones para dar sentido común a la escala salarial de la plantilla tras las  mentiras trasladadas a los representantes y los futbolistas azulgrana por el caso Neymar. Vamos con las novedades: el Barça sigue filtrando que todo va por el buen camino; analicen ustedes mismos.   

Tras tres meses de negociaciones (con algún capítulo terrible que, de momento, nos vemos en la obligación de obviar y que ha minado la moral y las relaciones entre las partes) el Barça se va acercando a las posiciones de Messi, es decir, convertirlo en el jugador mejor pagado del mundo sin contar con los derechos de imagen del futbolista. En la última contraoferta enviada por el Barcelona aparecen nuevas alternativas no vistas hasta el momento con ofertas de patrocinios venidas del más allá (alguna del más allá de siempre, Qatar) que, por supuesto, no interesan al jugador al que cerrarían mercados todavía vírgenes para la industria del crack o le harían entrar en conflicto comercial. Paralelamente, algunos acuerdos iniciales sobre las temporadas a las que afectaría el nuevo acuerdo económico parecen haberse traspapelado. U olvidado interesadamente. Estas pequeñas triquiñuelas sacan de quicio a los Messi. ¿Y éste es el único motivo de la baja forma del 10? Seguro que no, pero ¿qué gana el Barcelona con esta dinámica de cambios y de prolongación inútil de la negociación? De momento, a sumar un elemento más a que el jugador no se parezca al de los 4 balones de oro. ¿Se trata de una táctica de agotamiento? ¿Qué visualiza la Junta para alargar el conflicto? ¿A dónde quiere llegar? Habrá que ver quién tiene más paciencia...

Don Jorge Messi quería ir a Valencia a ver la final de la Copa pero no pudo. No tardará en llegar a Barcelona. El futuro del Barça está en juego. Y en peligro. A quien corresponda haría bien en no equivocarse. Por el bien de la institución.