La pista con techo más impresionante del mundo

El US Open ya está en marcha. Y lo hace sin una de las mayores preocupaciones para el cuarto y último Grand Slam de la temporada durante los últimos años: la lluvia.

Su nuevo e impresionante techo retráctil en el Arthur Ashe Stadium, la pista principal del Billie Jean King National Tennis Center de Nueva York, resguardará a jugadores y espectadores... y salvaguardará la programación televisiva.

Dieciocho meses de trabajo y un coste de 150 millones de dólares (unos 133 millones de euros) para presentar una estructura imponente, faraónica, que rodea la pista ya existente. A lo grande. Como todo en Estados Unidos. Y es que hablamos de la pista fija más grande del mundo, con capacidad para 23.771 espectadores. 

La pista se cerrará únicamente en caso de lluvia (en Nueva York no se aplicará la norma del ‘calor extremo’ que sí es válido en el Open de Australia para cubrir la pista). Así que a uno le viene a la cabeza la canción del corrillo, de cuando éramos niños, ‘que llueva, que llueva...’ para poder ver el funcionamiento de este prodigio tecnológico.

Aunque la organización desea todo lo contrario. 

Más de 6.500 toneladas de acero rodean el estadio en una estructura que se convierte en un sistema de soporte independiente. Y es que el estadio ya existente no habría podido soportar ese peso. 

Los paneles retráctiles se cierran en menos de siete minutos (realmente rápido) y permitirán, al menos, seguir el programa de la pista principal... para deleite de los aficionados que hayan comprado su entrada para esa pista pero, especialmente, para las televisiones. 

La USTA (la federación estadounidense) ha invertido un total de 500 millones (444 millones de euros) en remodelar la instalación. Porque las obras de renovación del Billie Jean King National Tennis Center todavía no han acabado. 

La que fue la pista principal hasta 1997, la Louis Armstrong, cambiará por completo en 2018 y contará también con techo (el Open de Australia ya tiene tres; Wimbledon, una). Y la Grandstand ya es otra. Gradas nuevas y una capacidad de más de 8.000 asientos.