LA ENTREVISTA DEL DIA

Nastase: "Nadal es un animal"

El rumano fue un genio controvertido, bromista y mujeriego. Su magia con la raqueta contrastó con lo ‘granuja’ que llegó a ser lejos de la pista. Indisciplinado y talentoso fue, ante todo, un artista

Ilie Nastase

Ilie Nastase / sport

Carlos Galindo

¿Sabía usted que fue uno de los ídolos de mi niñez?

No sé cómo tomarme esa pregunta. ¿Me está elogiando o por el contrario me recuerda lo viejo que soy?

Vera, me temo que las arrugas son bien visibles y no consiguen ocultar lo evidente. Todos envejecemos, incluso usted.

(Se ríe) No me lo recuerde... Le confieso que lo de los años lo llevo bastante mal. Envejecer se me hace muy cuesta arriba. Será que aún soy coqueto y me miro en el espejo cuando me levanto. La edad es un regalo que, con el paso de los años, se acaba convirtiendo en un castigo.

¿Qué queda del playboy que fue?

Los recuerdos y poco más. Pero disfruté; ¡vaya si disfruté!

¿Me está diciendo que ha perdido ese poder de seducción que tuvo entre las mujeres…?

Le estoy diciendo que he perdido, en parte, ese poder de seducción y que, ahora, con franqueza, me fatiga el ritual que se requiere para alcanzar ese instante de relación íntima. ¿Me estaré haciendo mayor...?

Me deja sin palabras.

No sabe cómo lo siento.

¿Se cae el mito…?

Siempre queda un poso, pero nada que ver con lo que fue. Esa es otra de las consecuencias del paso del tiempo.

Vayamos al tenis...

Vayamos.

¿Le sigue divirtiendo este deporte?

Claro que sí, aunque admito que ha cambiado en los sustancial, igual que sucede con otras modalidades. Ahora es mucho más físico que técnico. En mis tiempos, la raqueta era una prolongación de la muñeca. Ahora son dos herramientas independientes; la fuerza manda sobre el brazo y, en muchas ocasiones, las piernas sobre la cabeza.

Antes había más arte...

Si le digo que sí un sector de la afición me tachará de nostálgico y si le digo que no, quizá mienta. Así pues, que cada cual saque sus propias conclusiones.

Pero a mi me interesa su opinión.

Disculpe, pero me la reservo.

¿Y con qué etapa se queda?

¡Ufff! Me temo que no estoy en condiciones de contestar a esa pregunta. Creo que todos los ciclos son igual de importantes, con sus diferencias y singularidades. Hay que juzgarlos en su momento histórico y de acuerdo a las circunstancias que se dieron. No a posteriori...

Explíquese…

Verá, el ranking lo dominan jugadores como Djokovic, Nadal, Federer, Murray… Pero en mis tiempos estaban Jimmy Connors, Guillermo Vilas, Stan Smith y después llegaron McEnroe, Borg, Lendl… Cada época tiene sus figuras. Cuando jugaba, apenas había un par de tenistas más altos que yo (1,82 metros) y ahora, en cambio, todos me superan. Quiero decir que incluso ha evolucionado el aspecto físico de los deportistas. Le diré más: antes, en la década de los 70, las raquetas eran de madera y pesaban un montón y ahora, en cambio, son inteligentes y terriblemente ligeras... Todo es diferente; no sé si mejor, pero diferente...

¿Qué me dice de Nadal?

Rafa es un animal del tenis, un deportista de esos que nacen muy de tanto en tanto… Juega más torneos que nadie, corre más que nadie, se entrega más que nadie… Es un portento. Me encanta su carácter y entrega. Es un ejemplo para todos.

¿Cree que volverá a ser número uno del mundo?

Con Rafa cualquier cosa es posible. Por su estilo de juego, disputa todas las pelotas como si en ello le fuera la vida; desde la primera a la última. Claro que eso le pasa factura después....

¿Lo dice por las lesiones?

El tenis se ha vuelto muy exigente

Todo el mundo quiere ver a los campeones pero los campeones, a veces, se rompen. No se puede viajar de un punto a otro del planeta, cambiar de horarios, comidas... y seguir como si tal cosa. El cuerpo tiene un límite, incluso el de los tenistas.

¿Y no le apetecería entrenar a algún jugador?

(Se lleva las manos a la cabeza). ¿Y para qué...? Es algo que ya hice antes. ¡No, no...! Es muy sacrificado; no cometeré el mismo error. Decididamente solo me interesa el tenis como aficionado.

¿Qué le diría a los niños?

Que se diviertan y que no piensen en la competición hasta que crezcan tanto física como mentalmente. También les diría que practiquen todos los deportes posibles, fútbol, atletismo, ciclismo.... Y tenis, claro. Ya tendrán tiempo de elegir.

Confiese, ¿usted fue un gigoló?

Yo fui una persona que trató de vivir bien. ¿Qué es la vida sino eso? No me siento culpable de nada.

Lo dicho, un crack.