Marc Coma: "Será el Dakar más duro que se haya hecho en Sudamérica"

Marc Coma desveló 'las trampas' del recorrido

Marc Coma desveló 'las trampas' del recorrido / EFE

Josep Viaplana

Josep Viaplana

Marc Coma, director deportivo del Dakar, ha asegurado esta mañana en Barcelona que la próxima edición de la prueba, que se disputará del 2 al 14 de enero por Paraguay, Bolivia y Argentina, "será el más duro que jamás se ha realizado en Sudamérica". El de Avià, que ha ganado la prueba en cinco ocasiones en moto, ha subrayado que hay varios aspectos que apuntan hacia esa dirección: "El recorrido, el kilometraje, la altura, las condiciones climatológicas que van a encontrar los equipos y las novedades en la navegación, que van a dificultar mucho las cosas a los pilotos".

Será la segunda edición de la prueba con Marc Coma al frente de la dirección deportiva, pero el año pasado se encontró el recorrido cerrado y, pese a que pudo dar ya algunos destellos, en 2017 el recorrido llevará por primera vez su firma. "He podido reflejar un poco mi manera de entender la carrera y el ADN Dakar. Hemos conseguido devolver la navegación, un aspecto que últimamente había perdido importancia, al lugar donde se merece", indicaba en el acto que protagonizó en Barcelona.

Coma está convencido de que el paso por Bolivia puede ser decisivo este año porque "todo el altiplano está por encima de los 3.500 metros. Serán seis días en altura, cuando lo máximo que habíamos estado hasta ahora eran dos o tres". El catalán ve una de las ediciones más abiertas, ya que "no veo ningún favorito claro en ninguna de las categorías. En motos, Toby Price (vencedor en 2016) es el único de los que participan que ha ganado el Dakar, y eso puede darle una pequeña ventaja. En coches, creo que con el cambio de reglamentación Toyota, Peugeot y Mini van a estar a un nivel similar, siendo los pilotos los que marquen la diferencia".

Otro de los temas que se adivinan decisivos será la navegación. Marc Coma explica que "el GPS tendrá funciones mucho más reducidas con respecto a los años anteriores. La que más llama la atenciones es que el waypoint control no ayuda a la navegación, sino que únicamente nos asegura que los pilotos están siguiendo la ruta, pero el único instrumento para llegar a los puntos de control es el road book. Ello hace que los participantes, especialmente los copilotos, están un poco inquietos”.

Otra de las novedades es la introducción de una etapa maratón con formato de parque de trabajo en la que los pilotos, sin las asistencias, podrán intercambiar piezas entre ellos. Se volverá a introducir una etapa con orden de salida en función de la clasificación de la etapa anterior, mezclando las 10 primeras motos, 10 primeros coches y 5 primeros camiones. El objetivo que persigue la organización es "dar mayor protagonismo a los pilotos y que la carrera sea un poco más imprevisible, cortando así especulaciones y permitiendo que la carrera sea más interesante”, una circunstancia que en la última edición casi decidió la carrera.