Pedro nunca sobra, pero...

Pedro nunca lo ha tenido fácil en un ataque que históricamente ha tenido los mejores cromos del álbum futbolístico mundial. Fue un invento de Guardiola cuando se llamaba Pedrito y había estado a punto de dejar el Barça y la verdad es que siempre ha respondido. Autor de goles que valieron títulos, el año de las seis copas se permitió el lujo de marcar en las seis competiciones. Fue titular, pero siempre era el cambio fácil al lado de Messi, Henry, Eto'o, después Ibra y Villa y jamás tiró la toalla. Por eso tiene tanto mérito la trayectoria de Pedro, que en el 2010 incluso fue pieza importante en el Campeonato del Mundo que ganó España.

Un tipo que en estas circunstancias siempre ha remado a contracorriente tiene mucho mérito. Y hay que reconocérselo. Pero se ha llegado a un punto en que este tridente Messi-Suárez-Neymar parece demasiado para él. No tiene el protagonismo de antaño y hay que tomar una decisión. A sus 27 años, tiene cartel para probar en otras Ligas y demostrar su valía. Yo creo que en el Barça nunca sobra, pero también es cierto que el año que viene termina contrato y, si el club no tiene pensado renovarle, es el momento de buscar un traspaso que beneficie a las dos partes.

Insisto, Pedro nunca sobra, pero también hay que escuchar su corazoncito y tenerle en segundo plano y tapando a otro futbolista más joven que pueda tener proyección no es la situación ideal para nadie. De abajo vienen Deulofeu, Adama o Munir, y de fuera gusta mucho Dybala y si se impone la idea de Luis Enrique de traer a un '9' tipo Llorente o Dzeko, en vez de tener a un tridente como barrera tendría a un 'cuatridente'.

Todos los indicios apuntan a que Pedro no empezará la próxima temporada vestido de blaugrana. La solución de reubicarlo como lateral derecho no acaba de gustar al jugador y tiene ciertos riesgos para el equipo. Si se va, hay que reconocerle todo lo que ha hecho. Ha sido un grande sin tratamiento de crack... pero muy grande, que conste.