Leo Messi es otra historia

EL MEJOR. Para los que todavía se atan a sus bajas pasiones para negar el pan y la sal a Messi, solo una frase: Messi es otra historia. Cuando la historia anterior, la de Telmo Zarra, ha durado sesenta años no se puede mirar para otro lado y empezar a buscarle defectos al récord estratosférico que Messi batió ayer de la mejor forma posible, con un ‘hat trick’ espectacular.

Lo dicho, Messi es otra historia, que todavía tiene largo recorrido. Nadie sabe dónde detendrá el crack barcelonista su marcador dentro de muchos años. Porque esta es otra, sus enemigos, los enemigos del Barça, han soñado unos pocos días con que Leo se haya cansado del Camp Nou y se vaya con sus goles a otra parte. Un sueño tan perverso como efímero, pues Leo sigue siendo feliz en el Barça. Ayer bastaba con ver su cara de felicidad en la celebración de los goles, en el homenaje que el club le ofreció al final del partido, para darse cuenta de que el cuento de hadas no ha acabado. Quedan muchos días de gloria, muchos goles por celebrar, seguro que también muchos títulos... Messi es otra historia, la historia del mejor futbolista del mundo.

Seguro que Telmo Zarra, allá en el cielo, es tan feliz como Leo. Y es que si alguien tenía que superarle, nadie mejor que Messi, el futbolista que con la camiseta del Barça ha logrado todo lo que se ha propuesto, una leyenda de 27 años, el más grande de la historia. Después de sesenta años de reinado, ser segundo detrás de Messi es algo que dignifica el mérito y la memoria del gran ariete vasco.

Más allá del nuevo récord de Leo, el partido contra el Sevilla dejó motivos para la felicidad de los barcelonistas. El equipo reaccionó, se gustó y fue muy superior a uno de los rivales más sólidos del campeonato. Ahora, hay que revalidarlo en el campo del Valencia.