ESPAÑA-TURQUÍA

España se exhibe y ya está en los octavos de la Eurocopa

La selección bailó de nuevo al ritmo de Iniesta y Nolito sumó magia con su desequilibrio

Jordi Gil (Niza)

España dio otro paso adelante en su evolución. Tras las buenas sensaciones del debut, ayer fue a más y destrozó por completó a Turquía. El equipo tuvo toque y esta vez añadió dosis de eficacia, con un Morata finalizador y Nolito aportando el desequilibrio necesario. A esta fórmula se suma la clase de Iniesta y la Roja se sale. De  momento, ya está clasificada para octavos de final.

El partido empezó raro, tan extraño como es la selección turca. Ramos perdió un balón absurdo y vio la amarilla en el primer minuto. Turquía quería ser valiente, renunciando finalmente a los cinco defensas, pero pronto se la vio con poca fe.

Morata se reivindicó como delantero centro generando peligro constante. Suyo fue el primer remate y forzó otro de Batal en propia puerta que dio en el palo. Piqué no acertó en el remate del córner posterior. 

Vía libre en la izquierda

Turquía se veía desbordada. La banda izquierda era una autopista para Jordi Alba, mientras que Andrés Iniesta marcaba la ley. Tufan quiso pararle con una patada en el tobillo, pero el de Fuentealbilla continuó regalando magia, como en su estreno en la Eurocopa.

Turquía solo se acercaba de forma aislada con los lanzamientos de su especialista de libres directos, Çalcanoglu, y poco más. Arda Turan, escorado a la izquierda al estilo de cómo jugaba en el Atlético, no lograba arrancar como se espera de un líder.

España seguía creciendo con un Nolito inspirado. El andaluz lo probó de rosca, impactó mal un pase atrás de Juanfran y finalmente puso un balón de rosca a Morata para que cabeceara el primero.

Turquía y Arda, rotos

Los turcos están en un momento de fragilidad que España supo explotar. Tras un breve parón por un encontronazo entre Piqué y Busquets, Cesc se movió entre líneas para picar la pelota, Topal peinó mal hacia atrás y Nolito, el más listo de todos, se revolvió para lograr el segundo. Un mazazo para Turquía y Arda mostró la frustración con un lamentable lanzamiento desde la frontal.

Los otomanos se fueron en el descanso con la cabeza abajo y salieron otra vez al campo sin levantar el ánimo. Otra perfecta combinación española los liquidó. Andrés Iniesta se sacó de la chistera un pase entre líneas para Jordi Alba, quien en el límite del fuera de juego, regaló el tanto a Morata. El delantero juventino quería cerrar por completo el debate del ‘9’ y acarició el ‘ht-trick’ con un remate en plancha.

España ya podía empezar a pensar en los octavos de final y Turquía se fue al ataque para maquillar la  diferencia. Yilmaz tiró muy alto en  uno de los pocos ataques y Del Bosque ensayó con el doble pivote, Bruno-Busquets, para futuros envitets.