La operación con una cadena italiana está muy cerca de concretarse

El acuerdo por el hotel de Cornellà está al caer

La explotación representaría ocupar una parte importante del total de metros comerciales que el Espanyol dispone en la instalación deportiva

La operación con una cadena italiana está muy cerca de concretarse

La operación con una cadena italiana está muy cerca de concretarse / sport

Juan Carlos Gracia

El Espanyol confía en cerrar pronto, en el transcurso de uno o dos meses como máximo, el acuerdo con una cadena hotelera (¿italiana?) para la explotación de una parte importante de los metros comerciales del estadio de Cornellà-El Prat. Fuentes cercanas a la negociación han reconocido a esta redacción que ya se ha entrado en la fase final, la más compleja porque deben coincidir las necesidades de espacio del nuevo inquilino con la normativa deportiva. Los arquitectos ya están trabajando en el asunto, así como los abogados en diseñar los documentos, pero nadie duda que se solventarán todas las dificultades que puedan surgir y, finalmente, el estadio tendrá su hotel un proyecto que siempre se tuvo presente desde la inauguración de la instalación deportiva. Formaría una ‘L’ en el Gol de Cornellà.

El acuerdo para la futura explotación de un túnel de viento ocupó el espacio material donde más facilmente encajaba el hotel o oficinas, otra de las opciones que se contemplaron en su momento. Con ese acuerdo parecía que la posibilidad del hotel desaparecía, pero se ha encontrado otra ubicación que ha gustado a los interesados. Los trabajos actuales se centran en la ubicación del hotel en el Gol de Cornellà, el que utiliza La Curva, haciendo una ‘L’ hasta donde está el Espacio Memorial, el columbario que fue la primera operación comercial del estadio. Son muchos metros cuadrados donde, efectivamente, se puede explotar un hotel.

Si la sponsorización del nombre del estadio llegó de un contacto de Josep Sánchez Llibre, hermano del expresidente, la cadena hotelera italiana que desembarcará en Cornellà viene de la mano del hijo del exdirigente. Dani Jr., según confirman desde la propia entidad espanyolista. El grueso principal de la negociación la ha llevado a cabo el hijo de Sánchez Llibre y el responsable del área de marketing, y que actualmente compagina su cargo en el Consejo de Administración con el de ejecutivo a nómina de la sociedad, Ramon Robert.

El acuerdo, repetimos, está muy bien encaminado y nadie duda que será, tras el túnel del viento, el otro gran acuerdo comercial en la explotación de la instalación por el montante total de metros cuadrados que se alquilarán. La operación ha entrado en la fase decisiva. Ya hay proyectos sobre la mesa y los arquitectos deben estudiar la viabilidad de los mismos con las necesidades deportivas del Espanyol; además de los que abogados empiecen a redactar los documentos pertinentes de la operación. La ubicación del hotel daría, sin duda, un empujón muy importante a la explotación de los locales comerciales y, según los metros finales que ocupen, ya quedaría una parte más pequeña para explotar. Ha costado, pero poco a poco el estadio puede llegar a los ingresos previstos desde su inauguración.