Mascherano para un roto y un descosido

Mascherano para solventar las averías. El Jefecito para un roto y un descosido. El argentino como solución de urgencia para equilibrar la banda derecha ante la amenaza blanca.

Esta podría ser una de las grandes novedades de la alineación de Luis Enrique ante el Madrid. Masche jugando en el lateral derecho en una defensa con tres centrales y la duda de Alba -renqueante- o Digne. 

El asturiano tiene muy presente la fórmula ante el City en el Camp Nou (4-0) y podría repetirla frente a un Madrid que amenaza con tormenta tras el empate en Anoeta.

El cuerpo técnico azulgrana está particularmente preocupado por una banda izquierda del Madrid que cuenta con tres jugadores diferenciales: Marcelo, Isco, y en ocasiones Cristiano, que se mueve mucho por el centro.

Lo explicaba Sergi Roberto: "Al final, Cristiano parte de la banda izquierda, pero se acaba metiendo muy por dentro porque le gusta mucho llegar al área. Sí que es verdad que Marcelo es un lateral con mucha llegada pero, también son jugadores que atacan muchísimo y habrá espacios".

Mascherano apunta como solución de urgencia para el lateral derecho en el clásico

El canterano podría caer del once en favor de un Mascherano que ya sabe lo que es jugar de lateral derecho en el Barça (Leganes y City) y el Liverpool. La situación de Aleix Vidal ha hecho que Luis Enrique haya buscado alternativas en la plantilla y el Jefecito le ofrece velocidad e intensidad para el lateral. 

Un superviviente

"Tras cinco o seis meses, pensé que no estaría aquí muchos años. Mis características parecían ir en contra de todo lo que quiere el club", reconoció hace unos meses en una entrevista en The Guardian.

En la misma linea se expresó en Panenka para explicar su reconversión a central.  "No había otro camino. Me di cuenta de que con lo que venía al Barça no me alcanzaba, ni siquiera para permanecer en el club".

Y ahí sigue Mascherano, con estoica resignación, readaptándose constantemente a un equipo para el que parecía tener fecha de caducidad. Central, incluso, lateral, a pesar de que en ocasiones ha reconocido que hace tiempo que dejó de disfrutar (el fútbol) para sufrirlo.

"Digamos que no le encuentro el sentido a lo que muchos dicen de 'salgo a la cancha a disfrutar'. Los noventa minutos son un sufrimiento por el hecho de estar plenamente concentrado, de no equivocarme, de estar atento no solamente a lo mío sino también a lo que hacen mis compañeros", asegura.

"Tras cinco o seis meses en el Barça pensé que no estaría aquí muchos años"

No hay manera que tenga continuidad en el mediocentro, su posición favorito, e incluso ha ganado vigencia el debate en la albiceleste, donde muchos lo ven más como central.

En el Barça, Busquets sigue siendo indiscutible y otros futbolistas como Rakitic, Sergi Roberto e incluso André Gomes parecen haber pasado por delante suyo en la rotación.

Este curso se prodiga menos en los medios, quién sabe si cansado de algunas críticas que le persiguen desde que llegó. Nadie se atreve con los pronósticos sobre su futuro, a pesar de que el pasado mes de octubre firmó hasta 2019 tras un verano movido. "Cada vez siento más la necesidad de vivir en mi país", reconoce a menudo.