¿Y en quién pensará Puyol?

A mí todavía me cuesta -y eso que ya he tenido meses para acostumbrame, por desgracia- ver una pareja de centrales vestidos de azulgrana en la que no esté Puyol. Escribo estas líneas al filo de la medianoche, atenta al baile del mercato, y de momento la cosa sigue como hace tres años. ¿Qué opinará el nuevo adjunto a la dirección deportiva de ello? ¿Qué pensará, sugerirá, callará o verbalizará el gran capitán?  Porque si de algo sabe, es de fútbol. Y si es por especialidad, ésta es la suya. Aunque decía ayer que está en periodo de aprendizaje y aún no puede tomar decisiones, mejor voz autorizada no creo que encuentren. Porque pasan los meses, las semanas y los días y el Barça presenta la mejor delantera del planeta, un técnico que apunta maneras de líder además de verbalizarlas y buenas vibraciones... pero no llega el refuerzo deseado atrás. ¿Qué tipo de central se busca, se pone a tiro o se puede pagar? Porque hay que preguntárselo todo y, la verdad, no sé por qué orden. Hummels se irá al Manchester United por 20 millones de euros. Unos dicen que es lento y muy estático. Otros, que es de lo mejorcito que hay en Europa. Era mi apuesta personal y unos que que algo saben del tema se lo han llevado a la Premier. A estas horas, Mathieu no sé si está haciendo la maleta para ir a Perú con el Valencia o si suma ya su enésimo día de rebeldía. ¿Es él? Rafa Márquez dice en Rac1 que no lo ve “perfil Barça”. De ésto sabe, desde luego. Blind sigue su periplo en yate por las playas de Barcelona mientras espera que el club ché suelte amarras respecto a Mathieu ¿Es él? Y la última noticia apunta a la última promesa del Sao Paulo, Rodrigo Caio, al que ha ido a ver un integrante del cuerpo técnico. ¿Es él? A estas alturas de la película, me veo añorando más si cabe a Puyol. Y si lo veo en tejanos y camiseta sentado en el palco, se me van a llevar los demonios. Lo hemos tenido en casa 19 años y parece que vaya a tardar otros tantos en llegar otro. No será él, claro. Pero si se le parece ya nos vale, ¿no?