El semáforo del Barcelona - Bayern de Múnich

VERDE: MESSI

Faltan adjetivos para describir lo que significa Leo Messi para el FC Barcelona y para el fútbol. Mágico, extraordinario, espectacular, descomunal, increíble, inmenso, sensacional, grandioso, espléndido, vistoso, prodigioso, magnifico, excelente, fenomenal, fantástico. Estos y todos los otros sinónimos se quedan cortos para describir su grandeza.

El partido estaba roto, se podía decantar para cualquier lado. Y se resolvió cuando y como él quiso. Con un zarpazo que Neuer no pudo detener y con un quiebro que la cadera de Boateng le costará olvidar, Messi puso al conjunto azulgrana con un pie y medio en la final de Berlín.

ÁMBAR: LA POSESIÓN

Por primera vez desde que Luis Enrique es el entrenador del FC Barcelona, el conjunto azulgrana perdió la posesión en un partido. Fue ante el Bayern de Guardiola. Un conjunto que apuesta por el fútbol de toque y posesión. Un equipo que tiene en sus filas a hombres de la talla de Thiago, Müller o Lahm.

Sin embargo, a pesar de perder la posesión, el Barça supo adaptarse a lo que el partido requería en cada momento y casi sentenció la eliminatoria con los dos goles de Messi y uno de Neymar.

ROJO: DESIERTO

Delante de la espectacular actuación de Messi en el partido ante el Bayern de Múnich, que deja al conjunto azulgrana a las puertas de la final de Berlín, nos vemos en la obligación de dejar desierto este apartado.