Las caras nuevas del Barça B

Miguel Angel: La amenaza a balón parado

Eusebio Sacristán tendrá a su disposición a un especialista en lanzamientos de falta. Donde pone el ojo Miguel Angel, pone el balón

SPORT.es

El cántabro Miguel Angel Sainz-Maza es uno de los futbolistas más técnicos de los actuales miembros de la cantera del Barça. Junto al meta Miguel Bañuz, es quien lleva menos tiempo en el club de los siete que suben al Barça B, ya que llegó el pasado verano, procedente del Juvenil A del Racing, el club de su vida, un club que esta temporada será su rival en la Liga Adelante.

Son las cosas de la vida. Miguel Angel mamó racinguismo desde pequeño, ingresando en la entidad santanderina como Alevín B, procedente de la Escuela de Fútbol de Meruelo. Mediapunta de gran polivalencia, puede jugar también como extremo por ambas bandas. Vocación ofensiva acompañada de una excelente técnica y una no menos buena definición en los disparos a pelota parada.

Y si no, que se lo pregunten al portero de la Real Sociedad juvenil, Capilla, el pasado 3 de junio, en el partido de vuelta de los cuartos de final de la Copa del Rey en el Mini Estadi. Se agotaba el tiempo añadido y el árbitro pitó un libre directo a favor del Barça, escorado a la derecha de la portería. Una posición perfecta para un zurdo... pero Miguel Angel, pese a ser ambidiestro, define mejor con la derecha. El cántabro tomó la responsabilidad, levantó el balón por encima de la barrera y anotó un gol que clasificó a su equipo para las semifinales.

Los disparos de falta de Miguel Angel serán una baza muy importante para el filial esta temporada. Lo sabe Eusebio y lo sabía su primer técnico en el club, Oscar García. El de Santoña ha tenido muchos minutos esta temporada en el Juvenil A y ha ido ganando puntos hasta entrar en la lista de elegidos para dar el salto al Barça B. Como sus compañeros, sueña con completar el salto llegando a trabajar a las órdenes de Tito Vilanova... y, por qué no, regresar a las selecciones españolas de base. No en vano ya fue convocado en su momento por la Sub-17.

Pocos años antes de llegar al Barça, cuando aún era cadete, Miguel Angel estuvo a punto de volar de Santander y no precisamente con destino al Mini Estadi. Los cazatalentos europeos y clubes como el Real Madrid  le tenían en su punto de mira, pero el jugador aceptó la oferta del Racing de renovar y seguir su formación en Santander. Ahora, ya está a un solo escalón del Camp Nou y esta temporada será el terror de los porteros de Segunda A, cuando amenace desde su posición de francotirador con el balón. Ojo con él.