Y Cesc marcó a centro de Cuenca

Messi es infalible: hat trick... ¡y a octavos!

Leo Messi volvió a sentar cátedra con su fútbol y metió al Barça en los octavos de final de la Champions con otro 'hat-trick' de su cosecha. Cesc se sumó al festival marcando a centro de Isaac Cuenca

Ricard López

El Barça hizo los deberes en Pilsen y se clasificó matemáticamente para la siguiente ronda de la Liga de Campeones a dos jornadas para que acabe la fase de grupos. Una auténtica barbaridad. Y un revés en toda regla para quienes, desde el entorno madridista, osaron poner en duda la motivación de los de Pep Guardiola. El Barça podrá respirar tranquilo hasta febrero en Europa, sin otro aliciente más que el de asegurarse la primera plaza para poder disputar la vuelta en casa. Todo un respiro teniendo en cuenta el calendario de locos que les espera a partir de ahora, con la Liga, el derby ante el Madrid y el Mundial de clubs en el horizonte antes de que acabe el 2011.

Un triunfo sin Villa, Xavi ni Iniesta

Los azulgranas siguen dejando sin argumentos a sus pocos -pero ruidosos- detractores respondiendo con el idioma que hablan mejor que nadie: el fútbol. Y eso que este martes, al igual que ocurrió el sábado ante el Mallorca, Pep Guardiola dejó en el banquillo a buena parte de sus estrellas. Sin Villa, descartado, y con Iniesta, Xavi y Mascherano en el banquillo, el Barça se las arregló para doblegar a uno de los rivales que más difícil se lo ha puesto este año. El Viktoria Pilsen es un equipo con escasa tradición europea, poco conocido por el gran público, pero con unas cualidades sorprendentes. Ya lo había advertido Pep Guardiola en la víspera. "Es el equipo ante el que más hemos tenido que correr esta temporada". Y, a pesar del 0-4 final, esta vez no fue distinto. Los checos son un fuertes físicamente, agresivos, rápidos y su contragolpe es peligroso.

Espectacular Cuenca

Volvió el tándem Puyol-Piqué al eje de la defensa, Thiago 'hizo' de Xavi en la media, y Adriano de Villa como falso extremo izquierdo. Y lo más destacado de todo: Isaac Cuenca repitió titularidad. El canterano, de sólo 20 años, deslumbró de nuevo en su tercer encuentro como titular. Su desparpajo, rapidez y habilidad llevaron por la calle de la amargura a la defensa del Pilsen. Y algunos de sus detalles técnicos, incluso, motivaron los "¡oh!" de los aficionados culés.

Cisovsky, expulsado... y Messi se estrena de penalty

El Viktoria planteó un partido duro y rocoso. En el 12', el árbitro, el austríaco Robert Schorgenhofer, pasó por alto un penalty de libro cometido sobre Cesc. Pero, en el 21', señaló otro muy claro de Cisovsky a Messi. El defensa checo vio la roja por ser el último defensa. Y Leo no falló desde los once metros. Ejecutó la pena máxima con toda la serenidad y confianza del mundo (0-1, 23').

Valdés, providencial

El tanto dio tranquilidad a un Barça que, hasta ese momento, había hecho más aguas en defensa de la cuenta. De hecho, si aguantó con el 0-0 fue gracias a la inspiración de Valdés. El meta barcelonista estuvo prodigioso al desbaratar un uno contra uno ante Petrzela, después de que el rapidísimo delantero local se fuera por velocidad desde la media de Puyol y Piqué (16').

El segundo de Messi

El Barça, en superioridad numérica, pasó a controlar la situación. Y eso a pesar del juego duro de su rival, con el cual el árbitro fue muy permisivo. Cuenca lo intentó en el 35', con un disparo desde la frontal que salió rozando la escuadra. Poco después, Valdés superó el récord histórico de imbatibilidad que ostentaba Miguel Reina desde los 70. Messi estuvo a punto de sorprender en el 41'. Y, poco antes del descanso, llegó el 0-2. El argentino, entrando desde la media luna, hizo la pared con Adriano y batió a Pavlik con un chut ajustado y raso (0-2, 45').

Alves no jugará en Milán

La segunda mitad empezó con otra 'delicatessen' de Cesc que, tras combinar con Leo, acarició el gol con un remate picado que salió rozando el poste. Acto seguido, se produjo una de las pocas malas noticias del duelo, al ser amonestado Daniel Alves .Una amarilla que le impedirá disputar la próxima jornada ante el Milan.

Remate al larguero de Thiago

El Pilsen dispuso de opciones por mediación de Ptrzela, que estuvo cerca de marcar en el 66' con un chut a bocajarro. Y Thiago hizo lo propio un minuto después, cabeceando a la cruceta un centro de Messi.

Gol de Cesc... a centro de Cuenca

El 0-3, en el 71', fue obra de Cesc, aunque buena parte del mérito hay que dárselo a Cuenca. El canterano volvió a demostrar su calidad y descaro con una internada de libro de extremo derecho. Se fue de su par, sirvió un centro milimétrico... y el de Arenys, solo en el área pequeña, sólo tuvo que cabecear a bocajarro.

Alexis vuelve tras dos meses de ausencia

A partir de ahí, el Barça fue un vendaval. En el 73', llegó otra de las noticias más esperadas por los culés: la reaparición de Alexis, que volvió a jugar por primera vez desde que se lesionó hace casi dos meses, entrando por Abidal.

Leo pone la guinda

El 0-4, ya en el descuento, fue una obra de arte. Piqué asistió de tacón para Messi y Leo, tras driblar a Pavlik como si tal cosa, selló otro 'hat trick' para su colección. Otra lección más para quienes, desde determinados sectores, se empeñan en dudar de él y de este Barça. Los octavos ya están en el bote.