Hoy se cumplen nueve años del debut del manchego

Un día de gloria... no solo para Iniesta

El de Fuentealbilla debutó en Brujas, junto a otros compañeros del filial, que siguieron su camino lejos del Barça

Iniesta debutó con el Barça ante el Brujas

Iniesta debutó con el Barça ante el Brujas / sport

Jordi Gil

El 29 de octubre del 2002 siempre será un día grande en la historia del Barça por el debut oficial de Andrés Iniesta con el primer equipo, pero también fue memorable para otros canteranos que disfrutaron del partido más recordado de sus carreras. Los blaugranas se medían al Brujas en la primera liguilla de la Champions, ya clasificados, y Van Gaal recurrió al filial. Iniesta y Dani Tortolero formaron en el once inicial mientras que, David Sánchez y  Sergio García salieron en la segunda parte. Oleguer se estrenó en una lista y junto a Nano vivió el partido desde el banquillo.

Fue un día de gloria que no tuvo continuidad para la mayoría de ellos. Dani Tortolero, actualmente en el Girona, recuerda como “jugué en el centro de la defensa en el 3-4-3 con Puyol y Fernando Navarro en ambos lados. Andrés jugó de pivote por delante y no paraba de pedir el balón. Mostraba la misma tranquilidad que cuando jugaba en el Barça B y siempre que podía se la pasaba. Fuera del campo puede parecer tímido, pero dentro es muy seguro y no parecía nada nervioso por ser el debut”.

Dani recuerda el duelo en Brujas como “el más importante de mi carrera”, junto con el debut en el Camp Nou ante el Galatasaray en la jornada siguiente en un partido accidentado: “Tenía tantas ganas de salir que cuando Van Gaal me preguntó si estaba a punto, respondí que sí. Solo había hecho dos carreras en el calentamiento y estaba frío. Salí, esprinté y me lesioné. No dije nada y aguanté hasta que a falta de cinco minutos los isquios no me dejaron continuar. Fue mi último partido en el Barça. Van Gaal fue cesado y Antic creo que ni me conocía y no contó conmigo”.

Por su parte, David Sánchez prosigue su carrera en el ambicioso proyecto del Atlético Baleares en Segunda División B y aún recuerda con emoción el único minuto en el que jugó con el primer equipo: “Tengo guardada esa camiseta especial con el escudo de la Champions. Luego fui convocado en la Liga en Vigo, en el último partido de Van Gaal, En Brujas entré por Gabri y, aunque no pude participar mucho, fue un minuto maravilloso. Haber debutado con el Barça es lo más grande. He jugado en Primera, en otros equipos y países, pero la gente me recuerda por el Barça”.

David vio la mayoría del partido en el banquillo y destaca que “Iniesta lo hizo bien, como siempre, porque no sabe jugar mal. Era el más pequeño de los que fuimos a Brujas, pero nos transmitía una gran seriedad y confianza. Con los años tuvo el valor, la paciencia y, sobre todo, la calidad para seguir y consolidarse. Ahora es el mejor jugador español con diferencia y en el mundo, con sus características, solo puede superarle Messi. Es un orgullo haber sido compañero suyo”.

El centrocampista compartió cuatro años vestuario con Iniesta antes de avanzar como profesional precisamente en el equipo que vio crecer al de Fuentealbilla, el Albacete. Pese a tener que salir, David señala que “jugar en el Barça fue algo muy grande. Gracias a este club fui profesional y pude construir una carrera de la que estoy muy orgulloso”. Y siempre podrá decir que debutó al lado de Andrés Iniesta.