ADEMAR, 37 - FC BARCELONA, 43

Ademar y Barça apuestan por el espectáculo y olvidan la defensa

El Barça se impone en León a un Ademar en un duelo de ataques y donde Karabatic y Sigurdsson fueron determinantes en los últimos minutos

EFE

FC Barcelona y Ademar decidieron dejarse la intensidad defensiva en los vestuarios y optar por un cuerpo a cuerpo en ataque, donde se impuso la lógica del que mayores argumentos ofensivos tiene en un choque que podría repetirse la próxima semana en la final de la Copa ASOBAL.

La escasa aportación de ambas porterías, especialmente la local, que logró la primera intervención a doce minutos para la conclusión del encuentro -salvo una pena máxima en los compases iniciales-, permitió un marcador poco habitual en la competición liguera. Desde el primer instante se vio que ambos equipos, lejos de precauciones defensivas, sobre todo en la tradicional muralla azulgrana, se iban a decantar por el ataque, apoyados además en un enorme acierto desde todas las posiciones.

Los locales llegaron a ir mandando en el arranque, pero casi por la inercia de la enorme calidad en los lanzamientos, el Barcelona volteó el marcador, aunque nunca con una cómoda renta, salvo en el tramo final, en el que disfrutaron de cinco goles (16-21).

En la reanudación, el panorama no cambió lo más mínimo porque las facilidades que encontraban los azulgranas para anotar desde cualquier posición impedían que los leoneses se pudieran acercar, a pesar de que también estaban especialmente inspirados. La escasa intensidad, sobre todo en el lado catalán se ponía de manifiesto en un dato para el análisis, ya que hasta cuatro penas máximas detenidas por sus guardametas eran remachadas por los atacantes ademaristas ante la pasividad en los rebotes.

Ademar incluso llegó a hacer soñar a su afición cuando se colocó, a base de tesón y acierto a tan solo dos goles mediado el segundo periodo (28-30), pero solo hacía falta que un Sarmiento infalible continuara martilleando o que Sigurdsson -autor del primer error en el lanzamiento- continuara a lo suyo para llevar la renta a la máxima diferencia, seis goles, hasta el definitivo 37-43.