Anímicamente puede llegar tocado Miralem Pjanic de este parón de selecciones. El 8 de octubre era una fecha marcada en rojo en el calendario para el jugador balcánico y para todos sus compañeros del combinado nacional. Tenían ante sí una oportunidad magnífica de estar en la primera Eurocopa de su historia. Nunca ha participado Bosnia y Hercegovina en un Europeo de naciones (sí en un Mundial, el de Brasil 2014). El rival (Irlanda del Norte) y el escenario (el Stadion Grbavica de Sarajevo) eran propicios para pensar que esta vez sí podían lograrlo.

Pjanic: Un parón de trágico desenlace (leer noticia)