La final de la Supercopa, ¿con público?

El coronavirus continúa amenazando nuestra vidas. Las cifras de infectados aumentan y aumentan, hasta tal punto que el aviso de confinamiento sigue merodeando nuestra sociedad.

El fútbol no se libra de ello. La UEFA y algunas ligas empezaban a estudiar fórmulas para el regreso de los espectadores a los estadios. Pero todo parece indicar que la decisión podría demorarse. El Sevilla está pendiente de saber qué dictaminará el máximo organismo del fútbol europeo. En el horizonte cercano, el 24 de septiembre, los de Julen Lopetegui se desplazarán a Budapest para disputar el primer título de la temporada, la Supercopa de Europa ante el Bayern de Múnich. 

La UEFA cambio la sede, en un primer momento Oporto era la ciudad elegida, y ahora ven cómo Hungría cierra sus fronteras a los extranjeros. Sólo aquellos con motivos justificados podrán entrar en el país magiar. “La UEFA está trabajando en estrecha colaboración con la Federación de Fútbol de Hungría para tomar medidas y que se garanticen los protocolos de salud de todos los espectadores y participantes en el juego. Las condiciones de entrada a Hungría para varios grupos objetivo -jugadores, socios, personal, medios de comunicación y aficionados- también forman parte del debate”, comunicó la UEFA. 

Budapest... de momento

El organismo presidido por Aleksander Ceferin mantiene la capital húngara como sede de la Supercopa, pese a que algunos rumores hablaban de un presunto traslado a Lisboa. El partido se disputará en el Puskas Arena, con una capacidad de 67.215 butacas, el 30% de las cuales podrían estar ocupadas. El sevillismo quiere ver pronto en escena a su hexacampeón.