Zozulya seguirá sin entrenarse con el Rayo

Roman Zozulya seguirá sin jugar ni tener que entrenarse con el Rayo hasta que se aclare definitivamente su situación. El delantero ucraniano acudió este miércoles, acompañado por su representante, José Lorenzo, un notario y un abogado, a la llamada del club madrileño, una vez acabado el plazo de un mes para seguir ejercitándose con el Betis, su club de procedencia, donde permaneció debido al rechazo que su fichaje generó en buena parte de la afición rayista por su supuesta ideología nazi.

Lorenzo explicó el pacto alcanzado tras una larga reunión de tres horas fuera de las instalaciones del Rayo:  “Hemos puesto las bases de la negociación, y no puede alargarse. Si llegamos a un acuerdo, posiblemente no jugará. Si no, pues sí. En los próximos días seguiremos profundizando y buscando la mejor solución para todos”, afirmó el agente.

"Si llegamos a un acuerdo, posiblemente no jugará. Si no, pues sí", dijo su agente

Zozulya y sus agentes se reunieron con el director general del Rayo, Luis Yáñez, el director deportivo Ramon Planes y Cobeño, y no con el presidente Raúl Martín Presa, al no estar en la ciudad.

La ‘cumbre’ puso punto y final a una jornada surrealista, pues se celebró en un lugar ‘secreto’, lejos de las miradas -y protestas- de la hinchada: un centro comercial de las afueras de Madrid.

Zozulya llegó con su agente a la Ciudad Deportiva del Rayo poco antes de las cinco de la tarde, procedente de Sevilla. Pero, sorprendentemente, en las oficinas no les recibió ningún representante del club, hecho que certificó el notario que le acompañaba. Veinte minutos después, la comitiva abandonó las instalaciones para seguir un vehículo que les dirigió al insólito lugar de la reunión.

Los agentes de Zozulya estarían buscando, al parecer, otro equipo al jugador, que confía en tener permiso de la FIFA pese a haber miltado ya en tres clubs esta campaña. “No tiene miedo, pero teme por su familia. Si tiene que vivir con escolta...”, dijo su agente.