Messi, mucho más que un futbolista

El cirque du Soleil se estrenó en Barcelona

El cirque du Soleil se estrenó en Barcelona / AFP.

Lluís Mascaró

Lluís Mascaró

Hay personajes que trascienden más allá del tiempo y del espacio. Personajes que hacen historia y son historia. Seres tan especiales que sus virtudes les convierten en únicos e irrepetibles. Seres mágicos. Casi etéreos. Y Messi es uno de ellos. Su fútbol no entiende de lógica: Leo es capaz de hacer, en el césped, aquello que no ha hecho jamás ningún otro jugador. Y eso le confirma como el mejor de todos los tiempos. Sin discusión. Por lo que hace, por cómo lo hace y, sobre todo, por el tiempo que lleva haciéndolo. Coincidir en la ‘era Messi’ es un privilegio para todos los aficionados al fútbol, sean o no del Barça. Porque éste es otro de sus éxitos: la unanimidad universal (incluso entre los madridistas más acérrimos) en torno a su figura. 

Messi ya es leyenda. Y por eso no es de extrañar que el mágico Cirque du Soleil haya decidido crear un espectáculo basado en el crack argentino. Era una conexión lógica: el arte del fútbol y el arte del circo unidos bajo una misma carpa. Y la verdad es que el montaje capta a la perfección la esencia del virtuosismo del capitán blaugrana. Durante casi dos horas se suceden los números con el balón como gran protagonista. En una traslación perfecta de la fascinación que genera Messi con la pelota. El ‘10’ del Barça ya tiene su propio show con la calidad que un artista de su talla se merece. Porque lo que hace Messi es arte. Por eso es mucho más que un futbolista. Por eso es universal.