El valor de la Liga extraordinaria de Xavi

El Barça ‘solo’ ha ganado 26 Ligas a lo largo de su centenaria historia. No son tantas. El Madrid ha conquistado 35. Una diferencia sustancial entre los dos grandes del fútbol español. La trayectoria del club blaugrana en esta competición se escribe antes de y después de Johan Cruyff. Del Cruyff entrenador, porque el Cruyff jugador únicamente logró un título, la temporada 1973-74, la de su debut. Desde la llegada del holandés al banquillo, el Barça se transformó en un equipo campeón. Un total de 16 Ligas brillan en el palmarés del club en los últimos 32 años. Solo 10 títulos en las siete décadas anteriores. La diferencia es abismal. Por eso los culés nacidos a partir del Dream Team se han malacostumbrado a los triunfos.

Xavi, en su época de futbolista, también ganó muchas Ligas. Tantas como 8 en 17 temporadas. Vivió grandes momentos, pero también una enorme travesía en el desierto a principios del siglo XXI hasta la llegada de Laporta. Xavi, más que nadie, valora la trascendencia de conquistar una Liga. Porque es el título que da estabilidad al club. El título sobre el que, posteriormente, puede construirse un equipo campeón de todo. Es lo que pretende hacer con su Barça. De ahí que califique de extraordinaria esta Liga que hoy está un poco más cerca a pesar del empate con el Girona en el Spotify Camp Nou. Los blaugranas ya tienen 13 puntos de ventaja sobre el Madrid a 10 jornadas del final y pueden considerarse virtuales campeones.

El Barça ha empezado la cuenta atrás para sumar la Liga número 27 a su palmarés. Una Liga que tiene mucho mérito, viniendo de donde venimos. Una Liga que en el club y en el vestuario se valora enormemente. Aunque en el entorno se minimice su importancia, posiblemente por los fracasos en Europa y el doloroso KO en la Copa ante el Madrid. Pero sacarle 13 puntos de ventaja a los blancos es, precisamente, lo que demuestra la trascendencia de este título. El Barça ha demostrado una solvencia extraordinaria en esta competición. Solo dos derrotas y tres empates (con el de este lunes) en 28 partidos. Únicamente 9 goles encajados.

Los blaugranas han empezado a descontar encuentros. No esperemos ya fútbol brillante. Solo ir sumando puntos hasta que el título sea matemático. El esfuerzo ya se ha hecho. Ahora queda administrar con inteligencia la ventaja y celebrar el campeonato lo antes posible. Con las pocas energías que quedan…