Hay que romper la mala racha

Barça decepcionados

Barça decepcionados

Gerard López

Gerard López

El fútbol es así de caprichoso. Después de su exhibición en el Santiago Bernabéu, de haber permanecido quince partidos sin conocer la derrota, de haber dejado en el ambiente la sensación de que el equipo volvía a ilusionar y que todo era crecer y crecer, llegándose a hablar incluso de la posibilidad de que el Barça optara a la Liga, llegó el parón de selecciones y luego la confirmación ante el Sevilla en el Camp Nou. A partir de ese momento solo han llegado malas noticias y la sensación de que el equipo se ha caído en el momento que más ilusionaba. Diferentes factores pueden explicar el bajón que ha sufrido el Barça. A nivel general todo puede deberse a un cúmulo de circunstancias que explican que la sensación ahora es la de un equipo al que le falta mucho recorrido para acabar de construirse. Vamos a intentar enumerar las diferentes razones.

El aspecto físico es evidente. El equipo no está tan fresco como hace un mes o mes y medio. La presión no es tan efectiva en campo contrario y el equipo está más separado. Existe la sensación de que el equipo de Xavi ha sufrido un retroceso y eso hace que las piernas no vayan tan bien. 

A todo ello se le suma el desgaste mental. Siempre resulta difícil mantener el mismo nivel partido tras partido. El clásico y el posterior compromiso ante el Sevilla, es decir, dos grandes rivales, hizo que el equipo blaugrana se desgastara en exceso. Y luego llegó la eliminación de la Europa League, que dejó al Barça sin objetivos tan claros, por lo que a veces cuesta mentalmente mantener el nivel motivacional que hay que exigir a un gran equipo. Lo reconoció el propio Xavi el pasado domingo. Quizás no ha sabido motivar a su equipo para que aguantara este último tramo de Liga. 

La baja de Pedri quizás se ha notado también en exceso. Estamos hablando del jugador que consiguió revitalizar al equipo tras su vuelta en enero a través de su liderazgo, calidad, trabajo y aportación goleadora. Pedri se ha convertido en el líder en el campo de un equipo que estaba huérfano de jugadores desequilibrantes tras la salida de Messi. El canario había dado ese paso adelante y el Barça ha notado su baja. 

Los últimos rivales del Barça no han sido de entidad. A veces es más fácil notar la adrenalina el día de partido cuando te enfrentas al Real Madrid y al Sevilla que ante el Levante, el Rayo o el Cádiz.

Pese a todo, al Barça no le queda otra que levantarse tras estos malos resultados. Su próximo rival, el Mallorca, es de un perfil parecido. Se trata de un equipo de la parte baja que se está jugando la vida y saldrá extramotivado. Será un partido parecido al que el Barça vivió ante el Rayo y el Cádiz. El equipo blaugrana tendrá que prepararlo bien mientras mira de reojo los partidos de la Champions para volver a la senda del triunfo.